Adrián Cruz no tendrá que pasar por el quirófano. O, al menos, intentará evitar la sala de operaciones. La consulta del jugador en el día de este miércoles con los especialistas para valorar el tratamiento de la fractura de los huesos propios de la nariz confirmó el optimismo del futbolista, que pretendía apostar por un tratamiento más conservador y no tener que ser operado para poder reincorporarse a los entrenamientos con el grupo lo antes posible.
De este modo, en la que fue la última de las numerosas visitas a los médicos que Cruz ha tenido que realizar desde el pasado sábado —cuando Rufo, con un golpe fortuito, le provocó una fractura—, los médicos han dado a Adrián el visto bueno para tratar de que los huesos se suelden sin la necesidad de una intervención quirúrgica.
En teoría, los médicos señalan que una fractura así puede estar soldada en diez días desde que se produce. Será clave que durante este tiempo, el jugador no sufra ningún tipo de impacto en la zona, ya que dificultaría enormemente la curación.
El jugador espera poder entrar en la lista de Jesús Ramos para el duelo de la última semana de noviembre en Santiago
De este modo, Cruz seguirá al margen del grupo durante unos días y a partir de la próxima semana, espera integrarse de nuevo en los entrenamientos junto a sus compañeros. Para ello utilizará una máscara específica para este tipo de lesiones. Por el momento, será la misma que utilizó Romay el pasado septiembre. Cruz ya se ha probado la protección y entiende que se le acomoda lo suficientemente bien.
Al igual que el moañés, Romay también evitó en aquella ocasión el quirófano. El de Malpica chocó con un jugador del Sporting B y se hizo una fractura con hemorragia que le obligó a retirarse del partido. Entonces, la intervención del doctor Barragáns en el mismo momento para colocar la nariz fue clave para no tener que sufrir una cirugía.
Así, si nada se tuerce, Cruz acortará enormemente el tiempo de recuperación estimado. En un principio, desde el club informaron que podría estar de baja durante las siguientes seis u ocho semanas. Aquel pronóstico se basaba en una operación que, al principio, parecía la vía más probable para solucionar la dolencia tras realizar la primera radiografía y el primer TAC.
Sin embargo, con el paso de las horas, el optimismo creció y este miércoles se confirmó que Adrián Cruz podrá volver a los terrenos de juego más pronto de lo esperado. Esta semana no estará disponible ante el Salamanca CF en Pasarón, pero la intención del futbolista es poder entrar en la lista de Jesús Ramos para el duelo de la última semana de noviembre en Santiago.
Tras varios días ausente del trabajo con el resto del grupo, el de Malpica ha vuelto a entrenar esta semana junto a sus compañeros, al encontrarse mucho mejor de su problema muscular. A pesar de las buenas sensaciones, la precaución en el Pontevedra Club de Fútbol es máxima. La lesión ha evolucionado a mejor, pero en ningún caso se hará una apuesta arriesgada para forzar al futbolista.
Así, tanto el jugador como el staff técnico y el equipo médico esperarán hasta el viernes para tomar una decisión acerca de su presencia en el partido del domingo.
Borja e Imanol
El hecho de que Romay esté todavía entre algodones hace que, tras superar el ecuador de la semana, Jesús Ramos sepa que tendrá disponibles al100% a dos mediocentros con ficha del primer equipo: Imanol García y Borja Martínez.
El pamplonés ha sido un fijo en la medular durante el primer mes, pero el manchego todavía no se ha estrenado como titular, aunque ha participado siempre.
