Lupe Murillo: "El ascenso fue la ilusión de la temporada y el premio a un año muy difícil"

ASCENDIERON a División de Honor en la temporada más breve que se recuerda, marcada por la Covid-19, gracias al trabajo constante y desde la base, como apunta Lupe Murillo. Por ello, el Pontevedra juvenil ha sido galardonado con el premio HQR! a mejor equipo promesa.

¿Qué sintió cuando le dijeron que el Pontevedra juvenil ha sido premiado como mejor equipo promesa?
Para nosotros los premios siempre son una alegría, y en concreto el caso de un equipo de la cantera, pues más. Al final son los chicos los que demuestran que vale la pena apostar y seguir apostando por que esos niños de Pontevedra y cercanías den un poquito más para que al final el Pontevedra esté en las categorías más altas.

¿Cómo se vivió ese ascenso a División de Honor?
Fue un ascenso complicado, no fue una temporada fácil. En un momento determinado tuvimos que volver a empezar y entonces decidir si sacábamos a todos los equipos o no, porque había padres que tenían miedo y que no querían que los niños jugaran ni compitiesen. Hubo que recomponer toda la cantera. Era complicado ya de inicio, pero teníamos las expectativas puestas en que si salíamos, era a por todas. Fue una temporada cortísima, pero en ella tuvimos dos ascensos, uno de ellos el juvenil. No hicimos una temporada muy allá, pero al final se logró el objetivo del ascenso, que realmente era lo que estábamos buscando desde hacía años. No fue fácil ni perfecto hasta el final, pero tuvimos la suerte de cara y lo conseguimos. Es el premio a una temporada tan difícil. El ascenso fue la ilusión de la temporada, porque con el primer equipo no se habían conseguido los éxitos.

Lo cierto es que la incertidumbre se mantuvo hasta el final, con ese empate a puntos con el Coruxo...
Sí, lo peleamos hasta el final. De hecho la temporada no empezó muy bien con el equipo, pero luchamos hasta el final y creímos hasta el final.

¿Cuál cree que fue la clave para lograr el ascenso?
Es el trabajo del año. A veces escucho críticas y es evidente que cada modelo de cantera es diferente Nos plantean que busquemos a los mejores y yo busco a los mejores, pero también a aquellos más comprometidos con nuestro club, un tema de sentimiento. Nosotros siempre hemos apostado por gente de la casa, de hecho casi el 90% de los jugadores del juvenil llevan entre cinco y ocho años en la cantera del Pontevedra.

"Busco a los mejores, pero también a los más comprometidos con el club. Es un tema de sentimiento"

En los últimos años, el equipo estuvo subiendo y bajando, pero siempre vuelve a División de Honor...
Sí, siempre se intenta recuperar. Intentamos tener los equipos en las más altas categorías del fútbol gallego y nacional. La gente dice que apostemos por la cantera, pero no es tan fácil que todos lleguen al primer equipo. Además, es cierto que hay épocas de equipos que sabes que te van a dar alegrías y hay otros equipos que por circunstancias, son más flojos, y si tuvieras que fi char de fuera desharías ese equipo de abajo. A veces te pesa el sentimiento de niños que llevan toda la vida ligados al club. Es cierto que me toca a mí esa parte emocional y me peleo con la parcela deportiva. Nunca sabes dónde está el equilibrio de si buscar a los mejores o a los que tienen más sentimiento de club.

Ese trabajo en la cantera, ¿es lo que permite que el juvenil se nutra para llegar a División de Honor?
Sí. A lo mejor es un error a nivel deportivo, pero siempre he dicho que me encantaría tener el máximo de niños de Pontevedra, porque entiendo que el sentimiento de algo que es más tuyo, de tu ciudad, que llevas viviendo toda la vida, a lo mejor hace que el día que tienes que pelear, pelees mucho más.

¿Qué esfuerzo tiene que hacer un club para mantenerse en División de Honor?
La cantera no es barata. El juvenil tiene viajes en los que hay que pernoctar. Tienes unos gastos importantes. Nosotros pagamos gastos, por ejemplo, de chicos que están en la universidad. Hay un cambio de edad en el que tienes que entender que los jugadores priorizan los estudios.

En un momento en el que el fútbol se mide a golpe de talonario, ¿qué importancia le da el Pontevedra a su cantera?
La cantera es muy importante, pero sí es cierto que todos se mueven a golpe de talonario. El Pontevedra, de momento, no.

Los buenos resultados de la base, ¿son un aliciente para que cada vez más canteranos formen parte del primer equipo?
En este momento en la primera plantilla hay siete canteranos del Pontevedra, que esperamos que tengan esa presencia finalmente de verdad, y que demuestren que hemos apostado por ellos porque valen la pena y pueden llegar a ser grandes futbolistas. Les preparamos para eso, después hay una parte emocional que depende de ellos. Cuando llegan al primer equipo, la exigencia es máxima y deben ser mentalmente fuertes para competir con gente como Charles o Rufo.

Este año al juvenil le está costando más puntuar. ¿Cómo los ve?
Espero que este año demuestren que se merecen estar en la categoría, ellos consiguieron estar ahí, y compiten contra los mejores de España. A pesar de lo que diga la clasificación, han conseguido nueve empates fuera de Galicia. Eso significa que los equipos de fuera no les han podido ganar. En eso me baso para que mentalmente se hagan fuertes y confíen en que en la segunda vuelta, los resultados cambien.