PONTEVEDRA. Las lesiones no dan tregua al Pontevedra. Cuando parecía que se empezaba a despejar la enfermería, en la que solo quedaba Tubo, de nuevo una recaída hace que Manu Fernández no pueda tener a toda su plantilla disponible para el importante partido del próximo jueves contra el Boiro.
El protagonista de la mala noticia fue, de nuevo, Benja, que ya lleva tres recaídas de su lesión en la zona de los isquiotibiales y en esta ocasión es muy probable que sufra una rotura fuerte. El delantero se sometió ayer a unas pruebas para confirmar el alcance de su dolencia y, si se confirman los peores pronósticos, podría estar casi un mes de baja.
El futbolista sintió un pinchazo en la sesión matinal celebrada ayer en A Xunqueira. Las sensaciones, tanto del propio Benja como de la fisioterapeuta, Nerea Videira, no fueron positivas y Manu Fernández tampoco es optimista al respecto, ya que cree que hasta el primer o el segundo partido de la segunda vuelta no podrá volver a contar con el delantero, que se mostró bastante desanimado por la situación, ya que apenas ha podido contar con minutos esta temporada y, aún así, es de los jugadores con mejor promedio goleador del Pontevedra.
«No sé si llamarlo mala suerte o qué, porque ya van tres recaídas. Algo está fallando, algo estamos haciendo mal», comentaba Benja tras someterse a las pruebas médicas. El futbolista explicó, con cierto pesar, que «nunca tuve nada de esto, no estoy acostumbrado, así que hay que ir llevándolo poco a poco».
Benja admitió que «la ansiedad por jugar puede ser condicionante», por eso, en esta ocasión, quiere recuperarse perfectamente. «Viendo lo que hay detrás, habrá que ir con un poquito más de calma», afirmó, y con algo más de optimismo señaló que «vamos a seguir trabajando porque esto no se acaba aquí».
Lesionados
Contra el Boiro no parece que el Pontevedra vaya a poder recuperar a ningún jugador, pero para el siguiente partido, contra el Somozas, podrían volver Fran Fandiño y Javi Otero.
El primero ya está bien, trabajando con el grupo, pero Manu Fernández no quiere precipitar su regreso y el choque contra el Boiro no parece el adecuado para que vaya cogiendo ritmo de competición, que ahora mismo es lo que le falta.
Javi Otero, por su parte, todavía no ha completado ningún entrenamiento, algo que el técnico espera que ya pueda hacer la próxima semana.
Descanso hasta el lunes
La plantilla del Pontevedra realizó ayer su último entrenamiento de esta semana. El técnico, Manu Fernández, ha dado descanso a su equipo hasta el próximo lunes, aprovechando el aplazamiento de la jornada por la participación de la selección gallega de aficionados en la Copa de Regiones UEFA.
Los granates trabajarán lunes, martes y miércoles a las órdenes del técnico pontevedrés para preparar el encuentro contra el Boiro, que tendrá lugar el jueves a las 20.45 horas en el campo de Pasarón.
La plantilla encara este enfrentamiento con una motivación especial, ya que se trata de un rival directo, con lo que una victoria supondría recortar distancias con un equipo de la zona de play-off, y también porque quiere brindar a su afición un triunfo contra uno de los conjuntos fuertes de la liga, pues todavía tiene el mal recuerdo de los partidos contra el Deportivo B (1-2) y Cerceda (1-2), en los que la imagen no fue mala (sobre todo en el choque contra el filial blanquiazul), pero faltó lograr un buen resultado.
Tras el compromiso contra el Boiro, que solo ha perdido un partido esta temporada, el Pontevedra disputará dos más antes de finalizar el año y con los que cerrará la primera vuelta de competición. Primero visitará al Somozas, que actualmente es séptimo con solo un punto menos que los granates, y después recibirá al Dorneda, que se presume un rival complicado por las urgencias que tiene para alejarse de los puestos de descenso. El año 2014 lo empezará en casa contra el Choco.
