Se busca nueva pareja

Ángel Rodríguez deberá el domingo formar por primera vez en el curso sin el binomio Churre-Soto en el eje de la zaga
Curre y Soto, juntos en Pasarón. GONZALO GARCÍA
photo_camera Curre y Soto, juntos en Pasarón. GONZALO GARCÍA

El eje de la zaga es una de las contadas válvulas claves en el funcionamiento de un equipo. Sea cual sea el estilo de juego de un equipo, poseer a dos centrales que aporten seguridad como elemento principal se antoja un aspecto fundamental para el buen funcionamiento colectivo. Sino, pregúntenle al Pontevedra. Y es que Ángel Rodríguez ha apostado desde el inicio de la temporada por Churre-Soto como binomio inquebrantable. Y el nivel de ambos ha sido el mejor termómetro de las sensaciones del conjunto granate. Empezaron mal y el equipo lo notó. Pero se han entonado a nivel individual y en su compenetración y en los últimos dos meses, la del PCF ha logrado ser la segunda mejor defensa de la liga solo por detrás del Navalcarnero.

Pero en Langreo, la novedosa pero sólida pareja se rompió por primera vez. Churre vio la –rigurosa– segunda amarilla a poco del final y dejó en 1.334 la cifra de minutos que compartió ininterrumpidamente con el ourensano. Con un hombre menos y un nuevo acompañante para Soto, el cuadro pontevedrés no solo aguantó el empate, sino que logró culminar su remontada con un penalti.

El Pontevedra solventó con creces la papeleta en el Nuevo Ganzábal, pero ahora se le abre una nueva tesitura: encontrar al sustituto de Churre. Al cierre de esta edición, Competición no había publicado las sanciones de la pasada jornada como habitualmente hace los miércoles –era festivo–. Sin embargo, todo hace indicar que el marinense será sancionado con un partido de suspensión que deberá cumplir el próximo domingo ante el Ceares. Además, al ver dos tarjetas cuando estaba apercibido, cuando Churre regrese ante el Salamanca volverá a estar en peligro de sanción al no haber podido cumplir el ciclo (a efectos prácticos, regresará con cuatro amonestaciones de nuevo, a una de la suspensión).

UNA OPCIÓN CLARA. La ausencia segura Víctor Vázquez este domingo obligará, por tanto, a Ángel Rodríguez a estrujarse los sesos para recomponer a su pareja inamovible sin sufrir daños. Y quien parte como opción principal para estrenarse como titular es Samu Santos. El zaguero de Redondela se ha impuesto en las últimas semanas en la pugna que tenía con Pacheco por entrar en las convocatorias. De hecho, Santos fue el elegido por Rodríguez para entrar en los últimos minutos en Asturias, ya que era el único jugador de atrás convocado junto a Santi Figueroa. Esa tendencia de ser el más habitual en las listas, unida a su condición de zurdo y al hecho de haber dispuesto de más minutos a lo largo de la temporada le hace tener más papeletas para ser de la partida ante el Ceares.

Con su participación en Langreo, Santos ha tenido presencia en tres partidos, aunque en el primero (en Móstoles) actuó como lateral izquierdo de urgencia por las molestias de Araújo. En total, el ex del Choco suma 53 minutos –incluyendo tiempos añadidos– por los ocho que Javi Pacheco dispuso en Carballo. El canterano granate entró en los últimos minutos en As Eiroas para pasar a defender con tres centrales ante el asedio del Bergantiños, pero el pontevedrés ni intervino con balón, ni fue exigido en defensa.

Las de Santos y Pacheco no son las únicas opciones de Ángel Rodríguez para retocar el eje de la defensa. Y es que Seoane e incluso Javi Rey podrían ejercer como opción de central de urgencia. Sin embargo, ambas soluciones parecen poco probables. Por un lado, mover a Seoane haría que el equipo perdiese a un futbolista en banda derecha que está aportando no solo en defensa, sino también en ataque. Por otro lado, el cuerpo técnico tiene ganas de dar minutos a Rey, pero el mediocampista canterano no ha jugado nunca en esa posición y su fisionomía no parece la más adecuada para jugar en una línea defensiva que jugará la práctica totalidad del encuentro muy lejos de su área.

El Ceares, el peor visitante de toda la Segunda RFEF
El Unión Club Ceares visitará el domingo (17.00 horas) por primera vez el Estadio Municipal de Pasarón. Y lo hará como el peor visitante de la categoría, ya que el cuadro gijonés tan solo ha logrado un punto a domicilio, gracias a su empate en As Eiroas (0-0), en la segunda jornada de competición. Desde esa primera salida a Carballo ante el Bergantiños, el conjunto que dirige Pablo Busto encadena seis salidas consecutivas cosechando derrotas y en sus últimos dos partidos, además, fue incapaz de marcar gol.

De este modo, el balance del a domicilio del bloque asturiano es de 16 goles en contra y tan solo cuatro tantos a favor en seis encuentros.

Sin embargo, muchas de esas derrotas han sido disputadas hasta el final. Y es que más allá de las goleadas en Luanco (5-1) y Palencia (3-0), el bloque de Gijón vendió cara su piel en Segovia (2-1), en el Vicente Del Bosque (el Adarve le remontó 2-1 en los últimos minutos), Avilés (3-1) y Langreo (1-0). Además, el cuadro rojillo llega con la moral por las nubes tras superar en el estadio La Cruz al Salamanca por 1-0.

Pese a que las sensaciones no son tan pésimas como los números que maneja lejos del calor de su hogar, en toda la Segunda RFEF no hay un solo equipo peor que el Ceares a domicilio. Tan solo el Tropezón, del Grupo 2, le iguala ese registro de un único empate.

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