Alberto Campillo busca su segundo ascenso a Segunda División B. El central vigués del Pontevedra logró ese objetivo con el Ourense hace tres años e intentará renovar esa emoción con el Pontevedra. Con el conjunto ourensano, que también dirigía Luisito, las cosas fueron diferentes, ya que no hubo necesidad de recurrir a la repesca.
"Nos jugábamos el título de Liga contra el Deportivo B en el último partido de Liga. Nuestro rival en aquella oportunidad era el Alondras, que se enfrentaba al Racing de Ferrol, equipo que nos echó una mano. Empatamos los dos equipos y aquello nos favoreció", recuerda el jugador granate.
"Con el Ourense llegamos al play-off con la autoestima alta por haber conseguido el título de Liga en la última jornada"
"Llegamos a los cruces en un momento físico muy bueno y la elevada autoestima del equipo por haber conseguido el título de Liga en la última jornada pudo influir".
El rival del Ourense fue el Leioa, campeón del grupo IV, el de Euskadi. "En Llodio nos salió un partido espectacular, redondo. Llegamos a ponernos 0-3 en el marcador. Al final encajamos un gol que podía complicar un poco el ascenso, pero nos veíamos muy seguros de nosotros mismos". Ese aspecto será el que debe mejorar el Pontevedra actual, al que la derrota ante el Mensajero lo dejó tocado.
En el envite de vuelta ante los vascos, O Couto se llenó para vivir el salto de categoría. "En casa solventamos la eliminatoria logrando otro triunfo, con nuestra afición. Fue algo maravilloso", asegura el futbolista granate.
Su deseo no puede ser otro que volver a hacerlo con el Pontevedra. "Ojalá lo repitamos. No bajaremos los brazos". Para alcanzar la meta, el PCF debe primero remontar ante el Manzanares en la segunda ronda de la promoción. "El encuentro de Ciudad Real fue un golpe muy grande por la forma en que se produjo. Dispusimos de ocasiones de gol y no las transformamos. Si no ganábamos, siempre podíamos empatar. Pero ahora tenemos el hándicap de que debemos remontar el resultado del partido de ida, como nos sucedió contra el Mensajero", comenta el central.
"El Manzanares nos pareció un equipo muy noble y muy humilde. El partido de ida fue intenso, pero no sucio"
REACCIÓN. Campillo apela a la capacidad de reacción que ha mostrado el Pontevedra para conseguir sus metas. "Contra el Mensajero demostramos que somos un conjunto que estando contra las cuerdas supo reaccionar. Tampoco nos dejaron hacerlo de la manera que nosotros queríamos. Entre el equipo y la afición fuimos capaces de ganar el partido y equilibrar la eliminatoria, aunque después no lográsemos el ascenso. Esperamos que esta vez podamos solventar el enfrentamiento por más de dos goles de diferencia para pasar de ronda", desea el zaguero.
Y es que, en la campaña regular, bajo el mando de Luisito, el PCF siempre respondió a las derrotas o los empates con un triunfo en el siguiente choque. "Hemos demostrado durante toda la Liga que somos un bloque mentalmente muy fuerte, que nos levantamos a la semana siguiente de un tropiezo. No hemos tenido dos derrotas seguidas en todo lo que va de temporada. Llegar a Pontevedra con un gol en contra no es lo mismo que hacerlo con una igualada, pero estamos obligados a marcar igual. Mentalmente somos fuertes y confío en que el equipo reaccione como lo hizo cada vez que perdió el duelo anterior".
El defensa del once de Luisito sabe que el rival jugará al fútbol. "Por la sensación que nos ofreció el Manzanares allí, nos pareció que fue un conjunto muy noble y muy humilde. Fue un duelo intenso, pero no sucio, que es el fútbol que nos gusta ver. Si el partido se desarrolla como se desarrolló allí, tenemos opciones de sacar adelante la eliminatoria".
