Un ciclista del Froiz, herido en un atropello

Un monovolumen impactó con Abel Franco, que salió volando unos metros, en la rotonda próxima al Monasterio de Lérez

Abel Franco no sufrió ninguna lesión grave tras el accidente. DP
photo_camera Abel Franco no sufrió ninguna lesión grave tras el accidente. DP

Susto mayúsculo para el ciclista del Grupo Deportivo Super Froiz Abel Franco, que en la tarde del martes, mientras entrenaba en solitario, sufrió un accidente ante la presunta imprudencia del conductor de un vehículo que lo arrolló en una rotonda. Es el segundo incidente de este tipo que el joven ciclista sufre entrenando en carretera en apenas siete meses.

Por suerte, las consecuencias no han sido graves y el que es uno de los fichajes de la escuadra de Lourido para la campaña de 2018 se recuperará sin problemas. A última hora de la noche del martes le realizaron un TAC en el Hospital Provincial y, según confesaba el propio ciclista, no había que reseñar nada anormal. Solo se le ha diagnosticado una rotura de fibras en el gemelo de la pierna izquierda debido al impacto derivado de la caída sobre el asfalto.

Todo sucedió a primera hora de la tarde del martes, cuando Abel Franco se entrenaba solo y estaba tomando la nueva rotonda instalada al lado del Monasterio de Lérez para tomar dirección hacia la parroquia de Lérez. Un vehículo, un monovolumen marca Opel, presuntamente se saltó la prioridad cuando el ciclista iba por el carril exterior de la rotonda. El impacto fue brutal, pues el coche chocó frontalmente con la bicicleta del componente del Grupo Deportivo Supermercados Froiz.

El propio ciclista comentó a Diario de Pontevedra que "ya vi que se saltaba el ceda el paso y que era inevitable que impactara conmigo". La consecuencia fue que el ciclista salió volando casi unos tres metros para acabar en el carril central de la rotonda e impactando contra el suelo. Franco asegura que "fue una locura; me vi volando y menos mal que con los brazos y con las piernas evité que la cabeza se llevara un buen golpe con el asfalto. Fui dando varias vueltas sobre el asfalto. Unos testigos del choque me comentaron después que se temieron lo peor cuando me vieron volar". Confiesa que "nunca perdí la conciencia, me quedé sentado y empecé a marearme un poco. Menos mal que los testigos del accidente me atendieron" inmediatamente.

El conductor del vehículo implicado en el suceso enseguida se acercó al ciclista del Grupo Deportivo Supermercados para interesarse por él. Abel Franco confiesa que "el conductor reconoció el error, decía que no me había visto y me pidió disculpas porque reconocía su error". El joven ciclista de la escuadra de Lourido tenía moratones por ambas piernas, uno de los dedos de la mano izquierda dañado y "sentía muy dolorida la pierna izquierda". El casco terminó totalmente destrozado y la bicicleta inservible.

Una pareja de la Policía Local se personó después para levantar acta de lo sucedido.

El ciclista se fue calmando poco a poco hasta la llegada de una ambulancia medicalizada que lo trasladó al Hospital QuirónSalud Miguel Domínguez, en el que el ciclista estuvo acompañado de la responsable de prensa del club de Lourido, Ana Portela. El ciclista fue posteriormente trasladado al Hospital Provincial de Pontevedra para someterse al TAC. El propio corredor confirmaba al filo de las 21.00 horas que no había ninguna anomalía y que "todo quedó en un gran susto y, gracias a Dios, puedo contarlo". Estaba previsto que el ciclista fuese trasladado de nuevo al Hospital Miguel Domínguez para permanecer en observación.

En definitiva, el accidente sufrido por el joven corredor ourensano del Grupo Deportivo Supermercados Froiz quedó en un gran susto, pero pudo haber acabado en gran tragedia.

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