Con tres incorporaciones para dar réplica a las importantes bajas que sufrió el club al final de la temporada pasada y con el objetivo de lograr la permanencia en su segundo curso en Asobal de la historia, el Club Cisne comenzó este martes su pretemporada de regreso a Asobal.
Con 18 jugadores, a las órdenes del nuevo técnico blanco, Javier Márquez, el colectivo pontevedrés inició el trabajo en el Pavillón Multiusos de A Xunqueira en la tarde del martes.
La base de la plantilla se mantiene con respecto al pasado curso. Seguirán defendiendo los colores cisneístas los especialistas defensivos Alejandro Conde e Iván Calvo, los centrales Álex Chan y André de Moura, los extremos Mateo Arias, Javiva, Dani López, Diego López y Carlos Álvarez, el pivote Román Arboleya, los laterales Bruno Vázquez, Carlos Ocaña y Rubén Sequeiros y los guardametas Abián Rodríguez y Roney Franzini.
Además, el club se ha hecho con los servicios del central internacional por Cabo Verde Gaulther Furtado y el guardameta canario Kilian Ramírez, así como con el lateral izquierdo internacional júnior por Portugal Gabriel Cavalcanti.
En la sesión de ayer estuvieron ausentes Abián y los dos internacionales: Furtado acaba de concluir el Campeonato de África y tendrá unas jornadas de vacaciones antes de reincorporarse la próxima semana al bloque.
Por su parte, Cavalcanti, ha sido convocado para disputar el Europeo juvenil con su país y tardará algunas semanas en aparecer en escena.
Un pivote y un lateral derecho son ahora mismo las prioridades del club en el mercado para dar forma al colectivo. Para el lateral derecho, el Cisne está negociando la permanencia en plantilla de Carlos Pombo. Además, "estamos valorando otras opciones ahora mismo" para otras demarcaciones. Así lo explicó Márquez.
El colectivo ha perdido a jugadores relevantes con respecto al pasado curso: no siguen Pablo Picallo, Andrés Sánchez, Álvaro Preciado, Jorge Villamarín, Pablo González, Nicolás Samudio, Daniel Virulegio y Daniel Das Neves.
Pese a las ausencias, "empezamos con una gran ilusión para formar y solidificar lo que tiene que ser nuestro proyecto", explicó el técnico ante los medios en el comienzo de la sesión, en la que estuvo presente el presidente Santiago Picallo junto al grueso de la directiva cisneísta.

Márquez sabe cuál es la materia prima con la que trabaja: "hay mucha gente joven. Siempre es una arma de doble filo: descaro para ser capaces de tomar decisiones, pero muchas veces pecan de irregularidad. Tenemos que conjugar esa segunda premisa para que sean capaces de mantener una liga estable durante todo el año", explicó el responsable del banquillo pontevedrés, que espera que el bloque responda de forma positiva.
La pretemporada contará con semanas de un mínimo de ocho sesiones de trabajo para poner en forma al grupo. Márquez espera lograr un estilo de juego definido por las cualidades del grupo: "hay cosas que tiene la plantilla que deben continuar, cuestiones de sistemática inherentes al propio Cisne", explica
Con el grupo trabajan los canteranos Carlos Morales (lateral izquierdo), Denís (central) y Manu Lorenzo (pivote).
Rivales lusos y la Copa Galicia para abrir boca
El Académico de Braga portugués se medirá al cuadro de Márquez en dos ocasiones. El Aguasantas, también de la liga lusa, será otro de los rivales. Un triangular en Oviedo el 20 de agosto, ante el Zarautz y el Oviedo y la previa de Copa Galicia y las siguientes rondas del torneo del K.O. marcarán una pretemporada con "partidos suficientes", a juicio del técnico cisneísta.