Derbi gallego de alto voltaje

El Pontevedra Club de Fútbol busca romper su mala dinámica y un triunfo reparador ante el colista, el Cerceda 

David Añón conduce el balón en el partido ante el Valladolid B. JAVIER CERVERA-MERCADILLO - Pontevedra CF - PCF
photo_camera David Añón conduce el balón en el partido ante el Valladolid B. JAVIER CERVERA-MERCADILLO - Pontevedra CF - PCF

El Pontevedra CF lleva once jornadas sin ganar y el Cerceda, dieciséis. Con esta carta de presentación, el derbi gallego que se juega esta tarde en Pasarón se antoja con tintes dramáticos. Los dos equipos necesitan como el aire que se respira sumar un triunfo que les permita aliviar su mala clasificación.

A los granates no les vale otro resultado que no sea una victoria para callar bocas y olvidarse momentáneamente de la crisis de juego y sensaciones que están viviendo en las últimas semanas. La llegada de Luismi al banquillo granate ha dejado emociones dispares, pues en su debut en Pasarón hubo buenos apuntes, pero la derrota del otro día ante el Rápido de Bouzas volvió a poner de manifiesto que el equipo sigue sin tener una línea acertada y cada vez se están perdiendo más oportunidades para escapar de la zona comprometida.

En el bando granate la gran ausencia será Prosi, pues durante la semana no ha terminado de recuperarse de sus dolencias musculares y el técnico pontevedrés ha decidido no arriesgar. Quienes si están en la convocatoria definitiva son el guardameta Edu Sousa, que se recuperó de las molestias del pasado miércoles, y David Añón, quien, a pesar de los problemas derivados de la lesión de pubis, no se perderá la cita deportiva. Otra cosa será que el coruñés pueda entrar en el once de salida, algo que parece poco probable. También regresa el central Adrián León, después de cumplir el partido de sanción, y seguramente será la oportunidad para ver, por primera vez, a Nacho López, el último fichaje de la entidad granate.

En el bando de Cerceda hay más agobios en todos los sentidos teniendo en cuenta que es colista del grupo y viene de una racha tan negativa como llevar ocho jornadas sin sumar ninguno de los puntos en juego. El bloque que dirige Tito Ramallo se ha reforzado en el mercado de invierno con la llegada de David Álvarez, procedente del Rápido de Bouzas y que seguramente gozará de sus primeros minutos en Pasarón.

En definitiva, se trata de un derbi gallego con demasiados alicientes y con demasiadas exigencias para ambos conjuntos. Quien gane aliviará penas momentáneamente; quien pierda seguirá viviendo una semana más con tensión.
 

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