Casi tres décadas, exactamente 28 años, separan a Pontevedra CF y Arosa SC de su último recuerdo como rivales en Pasarón en una categoría superior a la Tercera División. En la tarde de este domingo, los dos equipos dejarán de sumar años a esta peculiar cuenta para verse las caras en el terreno de juego de Pasarón (17:00 horas), en un partido en el que están en juego algo más que los tres puntos que da la victoria.
Y es que los derbis se viven de forma diferente. Lo saben bien granates y arlequinados, sobre todo después de que en todo el siglo XXI los dos conjuntos solo hayan tenidos dos oportunidades para enfrentarse en partido oficial, en las cuales el Pontevedra salió victorioso.
De esta manera, el partido de este domingo en Pasarón cobra, si cabe, mayor importancia que la de un derbi al uso. Para llevarse un triunfo tan deseado, tanto Jorge Otero como Ángel Rodríguez cuentan con bajas considerables en sus plantillas.
Una jornada más, a los granates les toca hacer los deberes sin Rufo. Una falta que el propio técnico del conjunto lerezano reconoció notar sobre el terreno de juego, llegando a perder incluso un poco la esencia del Pontevedra que logró cuatro victorias consecutivas.
Nada más lejos de la realidad, el equipo de Ángel Rodríguez firmó uno de sus mejores partidos en la última jornada, que consiguió disipar las dudas sobre el daño que la falta del delantero madrileño podría causar al equipo.
Pese a ello, Rufo no es el único con el que no podrá contar el técnico. Romay e Iñaki se caen también de la convocatoria por problemas físicos, que obligan a ambos jugadores a mantenerse apartados del juego al menos varios días para poder recuperarse.
Por su parte, el Arosa mantiene en su lista de lesionados al portero Álex Cobo y al delantero Róber, ambos de larga duración. Además, esta semana Jorge Otero suma a su registro de bajas las de dos ex granates que no podrán enfrentarse al Pontevedra con la camiseta arlequinada: Alberto Campillo y Pedro García. El lateral derecho no llega a tiempo en su recuperación y se cae de la convocatoria por segunda jornada consecutiva, mientras que García se pierde el derbi después de abandonar A Lomba lesionado en el último partido ante el Salamanca UDS.
Para el derbi, Otero cuenta con 16 jugadores disponibles, entre los que destacan los juveniles David Conde y Migui Fernández, con los que el técnico ha decidido contar ante el número de bajas que acusa el equipo.
El PCF, peor local que visitante
Dinámica opuesta para el Arosa, que visita Pasarón tras sumar siete puntos como local y diez fuera de A Lomba.
BUENAS DINÁMICAS. Apunta la historia reciente a los granates como favoritos en el enfrentamiento de en la tarde de este domingo, pero lo cierto es que este derbi llega en un momento dulce para ambos conjuntos, sobre todo para un Arosa que parece haber dado al fin con la clave del éxito.
Tres puntos separan a los dos equipos de la comarca pontevedresa en la clasificación, que resulta engañosa al ver al Pontevedra en puestos de play-off y al Arosa más cerca del descenso.
Sin embargo, una victoria en la tarde de este domingo de los arlequinados cambiaría por completo el panorama. 20 puntos relucen en el casillero granate y permiten a los de Ángel Rodríguez situarse cuartos, aunque sus rivales más próximos en la tabla ya han disputado esta jornada.
Por su parte, el Arosa es undécimo con 17 puntos después de dos victorias consecutivas en las últimas jornadas. Los de Otero vienen de golear por 1-4 al Ceares y de lograr un importante triunfo por 1-0 ante el Salamanca.
Buena dinámica para los arlequinados, que no acababan de encontrar su punto sobre el terreno y que parecen haber encontrado la clave justo a tiempo para enfrentarse al Pontevedra en el derbi.
Los de Ángel Rodríguez lo han vivido todo en las últimas tres jornadas: derrota ante el Adarve, líder indiscutible, empate gris ante el Navalcarnero y victoria por 0-3 en la última jornada ante el Avilés, en uno de los mejores partidos de los granates esta temporada.
En la tarde de este domingo, Pasarón será escenario de un derbi que hará historia y en el que los dos equipos se juegan algo más que tres puntos.
"Mi etapa granate fue muy buena"
"Recuerdo una etapa muy buena en Pontevedra, porque era joven y tenía una visión diferente del fútbol", explica el delantero, "Pontevedra es una plaza especial y con una afición especial".
El delantero vigués viene de anotar cinco goles en la presente temporada con el Arosa. "Me encuentro bien, jugando muchos minutos, marcando goles y con el equipo totalmente adaptado y en buena dinámica", apunta.
La emoción de un derbi
"El partido es especial, un Pontevedra-Arosa de Segunda B 28 años después. Si le sumas que fui granate dos temporadas, tengo aún más ganas de jugarlo", explica Luismi. El delantero reconoce que un partido así "se vive de una manera distinta a los demás", y confía en que la afición arlequinada viaje este domingo a Pasarón.
"La afición debe animar"
El ambiente de derbi inunda las calles de Pontevedra y Vilagarcía desde hace una semana, aunque Ángel Rodríguez reconoció en la rueda de prensa previa al partido no percibir un ambiente diferente en el equipo: "Pasarón es muy grande. Los chicos están en un extremo del campo y yo en el otro. No percibo esa sensación de derbi en los comentarios que ellos puedan tener en el vestuario porque respeto su espacio", apuntó.
Sin embargo, el técnico granate reconoció que "todos sabemos que la intensidad con la que se juegan los derbis es diferente y está claro que tenemos que afrontarlo como tal". Para ello, Rodríguez hizo un llamamiento de apoyo a su afición: "Los aficionados deben animar al equipo y estar con él, hacernos sentir en casa como nunca. Para ganar tenemos que dar en Pasarón la versión que estamos dando fuera y al final todo irá a su sitio".
Por su parte, Jorge Otero, entrenador del Arosa, reconoció estar "con muchas ganas de afrontar el partido ante el Pontevedra y con la misma idea que siempre". El técnico arlequinado también quiso hacer hincapié en la categoría del rival: "Nos vamos a enfrentar posiblemente al rival más importante de la categoría, cuyo objetivo es estar arriba, o incluso ser campeón y ascender".
Al igual que Ángel Rodríguez, Otero se acordó en su rueda de prensa de la afición arlequinada, de la que se prevé que acudan alrededor de 200 personas en la tarde de este domingo a Pasarón: "Me imagino que a Pontevedra vendrá mucha más afición que en otros partidos y espero que seamos capaces de brindarles un buen partido y una victoria".
El técnico granate asume también la visita de gran parte de la afición rival, aunque entiende que esto no debe condicionar a su equipo: "Viene mucha gente de Vilagarcía, es entendible. Estamos muy cerca y acompañan a su equipo, pero entiendo que es un partido de fútbol y eso no debe pesar en los jugadores", apuntó Ángel Rodríguez.
Espera Jorge Otero que esa marea arlequinada que viaja este domingo hasta Pontevedra sirva como "doce" sobre el terreno y empuje a sus jugadores de cara a lograr una victoria para la historia.
Los sistemas vienen definidos por el rival. En casa tenemos la posesión y acabamos echando atrás al contrario
ESTRATEGIA. Ambos conjuntos llegan a esta nueva jornada de liga, la más especial hasta la fecha, tras una buena dinámica de juego y resultados, pero está claro que cada rival es diferente y los entrenadores ya tienen pensado cuál será su as bajo la manga de este domingo. "No podemos ir sólo a defender y más contra un equipo como el Pontevedra, porque sino es casi imposible puntuar", explicó Otero, "tenemos que hacerles daño cuando tengamos el balón, tienen que correr hacia su portería, aprovechar las debilidades que tienen y ver si somos capaces de llevar el partido a donde nos interesa".
En lo que se refiere al Pontevedra, Ángel Rodríguez destacó la principal diferencia que su equipo acusa cuando juega en Pasarón y cuando lo hace lejos de casa, donde esta temporada está obteniendo mejores resultados que ante su afición: "Los sistemas, los planteamientos, vienen definidos por el rival. En casa somos un equipo que tenemos mucho tiempo la posesión, y eso acaba echando atrás al contrario, que se protege, protege los espacios a las espaldas y dificulta más. Según pasan los minutos, va creciendo en su idea. Si al minuto uno abrimos la lata, a lo mejor el partido cambia y vemos al equipo de fuera de casa".
