Ríos con altos niveles de caudal, pero con temperaturas muy bajas es lo que se encontraron los pescadores que aprovecharon ayer una masificada jornada inaugural de la campaña fluvial 2013 en Galicia. La veteranía y la paciencia hizo que muchos aficionados completasen el cupo de 10 truchas por persona y día
el frío fue el mayor obstáculo que se encontraron los pescadores gallegos en la primera jornada de la temporada de pesca 2013. Alrededor de 60.000 cañas salieron a los ríos de la comunidad autónoma en un día perfecto para practicar deporte, pero muy difícil para capturar truchas. Hacía mucho frío, con viento del norte, y las aguas, en general, iban con temperaturas muy bajas, por lo que las truchas se escondían en los fondos, buscando resguardarse. Además, la claridad de la mañana, que, contra pronóstico, amaneció soleada, fue una aliada de los peces, que veían con más facilidad los cebos.
A todo ello hay que sumar el hándicap típico del día inaugural: la masificación de los cauces. Nadie quiere quedarse en casa el primer día, sobre todo si el tiempo acompaña, y esto provoca que haya demasiado movimiento en los ríos, algo que espanta a las truchas. Por eso, a medida que avance el curso se espera que las jornadas sean más fructíferas en cuanto a capturas.
A pesar de todo, los pescadores más veteranos fueron capaces de completar el cupo de capturas de 10 truchas por persona y día. A base de plomo, paciencia y experiencia fueron llenando sus cestas. Fue el caso de Ernesto García, que estuvo en Carballedo disfrutando de la primera jornada.
|
Consiga AQUÍ la información completa |
