El tiempo, bien aprovechado

El Pontevedra descansará este verano, de media, 4,5 días entre cada uno de los nueve partidos amistosos

Luismi (con el balón en la mano), dirige a sus jugadores en A Xunqueira. DAVID FREIRE
photo_camera Luismi (con el balón en la mano), dirige a sus jugadores en A Xunqueira. DAVID FREIRE

Suele decirse que mejor que sobre que que falte. Y por eso, el Pontevedra no ha escatimado a la hora de acordar partidos de preparación para la temporada. El equipo quiere aprovechar bien el tiempo y esta semana será, sin lugar a dudas, la más dura de cara a preparar el curso: el conjunto granate disputará nada menos que tres partidos en un intervalo de solo cuatro días. Un maratón de encuentros después del cual ya solo faltarán tres citas repartidas en dos semanas antes de comenzar la competición oficial en Salamanca.

El plan preestablecido era que Luismi y sus chicos se enfrentasen el jueves (20.30 horas) al Arenteiro en O Carballiño para, después, ya el sábado, hacer lo propio frente al Juvenil de Ponteareas del exgranate Óscar Guimeráns, en el ponteareano campo de Pardellas (20.30 horas). Sin embargo, la semana pasada se anunció que el equipo jugará el viernes en el Municipal de Pasarón contra el Deportivo Fabril (20.30 horas). Así, y después de jugar ya entre semana, el conjunto granate volverá a su feudo y, solo 22 horas después de la finalización del partido, se medirá al cuadro ponteareano.

El conjunto pontevedrés comenzó la pretemporada el 12 de julio y la temporada empezará el próximo 26 de agosto. Eso le da al grupo un margen de 45 días, o seis semanas y media, de tiempo para aprender, asimilar y mejorar todos los conceptos necesarios para comenzar el curso ya como un equipo formado, trabajado y compacto. El equipo se ha enfrentado ya a sus cuatro primeras citas de pretemporada —se cuenta el triangular de Moraña como una al ser dos partidos de 45 minutos en la misma tarde, por lo que todavía le quedan seis: esas tres de esta semana, además de los choques frente a Betanzos, Racing de Ferrol y Alondras. De media, los chicos de Luismi descansarán 4,5 días entre partido y partido, algo más de lo que lo hicieron la temporada pasada y bastante menos que hace dos.

Veranos anteriores. En 2017, el Pontevedra dispuso de 34 días entre el comienzo de la pretemporada, el 17 de julio, y el 20 de agosto. Así, y al jugar dos citas menos que este año, el período medio de descanso entre partido y partido fue de 4,25 días, algo menos que en la presente pretemporada. El verano anterior, el de 2016, el equipo granate tuvo todavía menos choques preparatorios: seis. El 18 de julio comenzó la precampaña y el 22 de agosto el campeonato liguero. Fueron un total de 37 días en los que el equipo pontevedrés disputó tan solo seis encuentros preparatorios, por lo que el descanso entre cada uno fue de algo más de seis días. Queda claro que este verano Luismi y sus chicos aprovecharán el tiempo.

Comentarios