La derrota contra el Cerceda del pasado domingo no solo acabó con la racha de cinco partidos consecutivos sin perder del Pontevedra, sino que también rompió la imbatibilidad de la portería granate, que se mantuvo cuatro encuentros sin encajar gol en jugada (contra el Villalonga recibió uno, pero de penalti).
Para el guardameta Sergio Lloves el resultado del último choque fue especialmente doloroso, sobre todo porque el 0-1 llegó en el tiempo de descuento. «La derrota contra el Cerceda nos fastidió mucho porque fue en la última jugada. Pero no pasa nada, llevábamos toda la segunda vuelta sin que nos marcaran gol en jugada, sin perder partidos, y lo importante es estar tranquilos. Ahora toca intentar ganar en Vilalba», señaló.
El futbolista redondelano está en un gran momento de forma y, lo más importante, con mucha confianza. «Creo que llevo el mejor mes desde que he llegado al Pontevedra, no estaba tan bien desde hace mucho tiempo. Y a pesar de la derrota, el equipo sigue igual, el otro día el Cerceda tuvo alguna ocasión, pero no fueron tantas como parece. Yo solo tuve que intervenir en una, que me dio en el pie, ni la paré yo», destacó.
