España volvió a vencer. Suma tres de tres y ya está en octavos. Pero tiene margen de mejora. Los 'Hispanos Júnior' tuvieron que sudar de lo lindo para superar a una correosa Serbia, que no dio su brazo a torcer hasta los minutos finales y amagó en varias ocasiones con empatar un marcador en el que mandó desde el principio el conjunto de Isidoro Martínez. Aun pese a su iniciativa, el bloque español nunca terminó de poner tierra de por medio y tuvo que tirar del talento de su primera línea para sentenciar el triunfo. Unos brillantes Pol Valera y Eduardo Cadarso resultaron decisivos en los momentos apretados para que la victoria no volase del bolsillo del anfitrión y, con ella, la clasificación matemática a octavos de final con dos partidos de antelación.
España volvió a repetir la fórmula defensiva que tan buenos réditos le dio contra Túnez. El 5:1, con Adriá Martínez de avanzado inicial, funcionaba a la perfección para que Serbia no encontrase el camino hacia Kilian. La misma estrategia seguía el conjunto de Rojevic, con resultado diametralmente opuesto. Porque Amilibia, ayudado por los aclarados de Cadarso y Natan, jugaba a placer. Así llegó el 3-0 inicial, que se convirtió en el 6-2 de Cadarso a los ocho minutos -ayudado España por la primera exclusión visitante-.
A pesar del gran arranque de los 'Hispanos', Serbia apretó y llegó al descanso sólo un gol por debajo
Rojevic pedía tiempo muerto. Pero el parón no evitaba que, en la primera de las pocas transiciones que pudo ejecutar España, Adriá Martínez pusiese el 7-2. Era el minuto 12. Todo iba que ni pintado. Pero Serbia despertó y, en apenas un minuto, se creció con un parcial de 0-2 tras un ataque posicional y un error de Natan. El conjunto azul ya defendía en 6:0. Y con los cambios hispanos, Serbia se lo empezó a creer. España comenzó a fallar, condicionado por un Jandric que creció en la portería. Tres lanzamientos sin tino de Diocou condujeron al 9-8 de Milenkovic, que hacía daño desde el pivote y también en transición. Era el minuto 24. Martínez pedía tiempo muerto. España volvía a desconectarse y dilapidaba una renta cómoda.
REACCIÓN
Entonces, en el peor momento del anfitrión, apareció Pol Valera. El lateral de Granollers adquirió la responsabilidad y firmó tres goles seguidos -uno espectacular, de espaldas y con exclusión forzada incluida- y colocó el 13-10, que parecía nuevamente cómodo, hasta que dos errores infantiles provocaron que al descanso la ventaja fuese mínima (13-12).
En el segundo tiempo, España y Serbia salieron animadas y con ritmo. Cadarso, ayudado por un mejor Natan, ampliaba al 18-15. Pero los 'Hispanos' no defendían bien e Ivanovic ponía el 19-18 (min. 40). Los serbios sacaban a pasear su lanzamiento exterior, pero la primera línea española dirigía atenciones para que Gonzalo Pérez ejecutase con tres goles seguidos (22-19).
Quedaba algo más de un cuarto de hora y Serbia se alejaba. Pero nuevamente no se rindió el equipo eslavo y Milosavljevic perdonaba la oportunidad de empatar 23-23. Eran los momentos más calientes del partido y ahí volvió a aparecer la calidad Cadarso y, sobre todo, de Pol Valera, que anotó el 26-24 y el 27-24, mientras Serbia no terminaba de enlazar dos ataques con gol y se quedaba a las puertas ante una España que tuvo que apretar los dientes.
Serbia (26): Jandric, Vignjevic, Srdan M. (1), Nikolic (3), Milenkovic (4), Ivanovic (3, 2P) y Tomic (3) —equipo titular— Micic (ps), Trkulja, Todorovic (2), Mijatovic (2), Milan M. (5), Maksic (1) y Milosavljevi (2).
Marcador cada cinco minutos: 3-1, 6-2, 8-4, 9-7, 10-9, 13-12 (descanso); 17-15, 21-18, 22-21, 23-22, 25-24 y 29-26 (final).
Árbitros: Mitrovi Novica y Vesovi Miljan (Montenegro ). Mostraron tarjeta roja por acumulación de exclusiones a Vignjevic (min.29). Además, sancionaron con dos minutos a Goenaga, Álvaro Martínez y Serradilla por parte de España, y a Milenkovic, Todorovic, Mijatovic y Srdan Milic por parte de Serbia.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la tercera jornada del grupo A del Campeonato del Mundo Júnior de balonmano masculino disputado en el pabellón municipal de As Travesas ante unos 500 espectadores.