En el descanso del partido de hace ocho días, el Pontevedra estaba a seis puntos más goalaverage del liderato. En el partido que estaba deseando jugar durante toda la temporada para recortarle puntos al líder, el Pontevedra caía y veía cómo sus opciones de ser campeón se le escurrían de las manos. Era el momento propicio, pero el Unión Adarve se escapaba definitivamente tras una primera parte en la que aprovechó al máximo su única llegada clara. Pero el conjunto granate no se vino abajo y, apoyado en un Pasarón que empujó al equipo como en épocas pretéritas, sacó adelante un duelo directo para seguir soñando con ser campeón.
La diferencia se recortaba a tres puntos, pero en el horizonte estaba un Navalcarnero que partía con la opción de convertir el mano a mano en una lucha de tres. Así, el PCF se plantaba en un campo en el que tan solo el Leganés B había ganado ante un rival en buena dinámica, sólido atrás y con capacidad para hacer daño a través de juego combinativo. Pero el conjunto granate ya había cogido carrerilla. Y en una nueva demostración de poderío, venció al tercero y se alejó -casi- definitivamente de él.
De este modo, solo el empate in extremis del Unión Adarve por la mañana, en su casa ante el Compostela, empañó una nueva jornada casi redonda para los intereses del equipo lerezano. Fue esa igualada la que privó al equipo dirigido por Ángel Rodríguez de ser líder por primera vez este curso.
Ese punto conseguido por el equipo madrileño en el añadido le sigue permitiendo depender de sí mismo para ser campeón. Pero esta circunstancia no provoca que la felicidad haya vuelto a Pasarón. Y es que en el entorno del PCF se ha vuelto a instalar el optimismo gracias a los cinco puntos recortados en dos jornadas claves en las que el equipo fue capaz de derrotar a sus rivales más directos. Un estigma, el de la competitividad ante "iguales", que le había perseguido durante todo el curso y que se ha sacudido de un plumazo.
LLAMAMIENTO. Con la ilusión de nuevo disparada después de mucho tiempo sin poder disfrutar de una buena racha a nivel deportivo, el equipo no duda en aprovechar cualquier ocasión para solicitar a la afición que no ceje ahora en el apoyo. A falta de tres encuentros en Pasarón y el derbi ante el Arosa, la plantilla y el cuerpo técnico entienden que el aliento de la afición será un factor fundamental para que no se escape ningún punto más de la provincia.
Uno de esos mensajes apelando al granatismo lo ofreció Charles al término del encuentro. El brasileño, que el lunes cumplió 38 años, destacó que ve cómo "la gente" cree en la plantilla. "Y nosotros creemos en ellos. Esperemos que el domingo Pasarón esté como en el último partido. Así las cosas siempre son más fáciles", apuntó.
De este modo, este próximo domingo a las 17.00 horas ante el Real Avilés la hinchada tendrá la oportunidad de responder a la llamada y ayudar a que el PCF siga a la caza del líder o, quien sabe, logre asaltar el deseado liderato.
