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Fernando Echávarri: "Sin duda me he metido en esto para estar en los Juegos"

El regatista, que aspira a llegar a Río, comenzó su el ciclo olímpico afrontando una aventura oceánica, posteriormente fue entrenador del equipo ruso, del italiano y de íker Martínez y Tara Pacheco, que ahora es su compañera después de haber contado con Lara Cacabelos como tripulante
El regatista Fernando Echávarri, un pontevedrés de adopción
photo_camera El regatista Fernando Echávarri, un pontevedrés de adopción

Fernando Echávarri prefiere ser prudente, pero aunque no lo diga abiertamente sueña con que los de Río de Janeiro sean sus terceros Juegos Olímpicos después de los de Atenas 2004 y Pekín 2008 (fue oro en clase Tornado) y de haberse quedado a las puertas de los de Londres 2012. No tiene ningún reparo en decir que si está inmerso en esta aventura es porque se ve con posibilidades en una de las selecciones internas más duras de la vela española. Dos campeones olímpicos cara a cara: Fernando Echávarri (Tara Pacheco) versus Íker Martínez (Julia Rita), por lo que no es de extrañar que muchos consideren que para ambos será más duro estar en las aguas de la contaminada bahía de Guanabara que conseguir una medalla. Por el momento el pontevedrés, tras el Mundial del pasado mes de febrero, ha tomado ventaja, pero ahora tiene que confirmar su posición en Palma de Mallorca (Trofeo Princesa Sofía) y en Hyéres (Semana Olímpica Francesa).

¿Después del Mundial de California ve más cerca los Juegos de Río de Janeiro?

En tiempo sí porque cada vez queda menos, pero estamos inmersos en una selección muy dura. La verdad es que hemos trabajado muy duro porque ha sido un proyecto muy corto ya que solo hicimos 2015 entero y ahora 2016. Para todo el mundo son cuatro años y en mi caso será año y medio.

"Para todo el mundo la preparación olímpica son cuatro años y en mi caso será año y medio. Es una contrarreloj"

Este ciclo olímpico ha sido muy atípico para usted porque fue entrenador del equipo ruso y de Íker Martínez y ha tenido dos compañeras. ¿Se imaginaba estar en esta situación?

En 2013 yo hice una aventura transoceánica con Mapfre (la ruta de Colón) y mi idea era navegar en el Nacra al regresar, por lo que compré un barco, pero al volver a España hablé con gente que ya lo estaba usando y no lo vi muy claro, por lo que opté por dar un paso al lado. Un día Íker (Martínez) me llamó y me pidió si podía usar mi barco y yo fui su entrenador. Toda esa experiencia me ha servido como preparación para esta etapa porque sino sería imposible de entender la progresión que hemos realizado en tan poco tiempo. Estuve cercano a la clase, pero sin navegar hasta que lo tuve claro.

Su periodo de entrenador (del equipo ruso, italiano, del español…), ¿para que le ha servido de cara a ser regatista de la clase Nacra?

No es lo mismo meterse en una clase a ciegas que teniendo referencias aunque fuera desde lejos. El año pasado ya estuvimos en puestos de cabeza y ha sido por la experiencia adquirida.

¿Las dudas iniciales en qué se han convertido ahora?

Yo nunca lo tuve claro porque no solo era una cuestión de hacerlo bien sino de tener una serie de cosas, recursos, material… ¡Necesitas muchas cosas! Cuando decidí volver fue porque me apetecía navegar. No me veía estando en una lancha. Habían pasado muchas cosas y estaba convencido de que podíamos hacerlo bien. Ha sido todo muy bonito, con una progresión constante a pesar de todos los problemas que hemos tenido. No ha sido tan fácil como en otros periodos olímpicos, pero lo importante es que estamos rindiendo bien.

¿Está inmerso en una frenética contrarreloj para llegar a Río 2016?

Siempre es una contrarreloj. Preparar unos Juegos en año y medio y tratar de hacerlo bien es una locura. Cada día dominamos más el barco y vamos mejor, pero queda poco tiempo, aunque tampoco podríamos hacer más porque no tenemos los recursos de antaño. Nuestras limitaciones son muchas. Es muy difícil conseguir financiación y es una clase (la Nacra) muy cara.

"El que vaya a los Juegos tendrá opciones de cualquier cosa porque somos dos tripulaciones muy buenas"

¿La falta de recursos económicos le está condicionando?

Por supuesto. Básicamente porque la Federación Española no tiene acceso a los programas de ayuda a la compra de materiales del pasado y todo lo tenemos que pagar nosotros. Contamos con ayudas muy pequeñas. Esto no tiene nada que ver con épocas anteriores.

Tras retirar la IAAF el Tornado como clase olímpica se quedó en tierra de nadie. ¿La entrada del Nacra le ha servido para recuperar la esperanza de regresar a unos Juegos?

Lo que estamos haciendo no sería posible si no hubiera estado navegando tantos años en el Tornado. Es un barco diferente, pero el Nacra se parece más que el Star (preparó en esa clase los Juegos de Londres 2012). Es una embarcación que conozco, pero es distinta porque es más ‘cabra loca’, la tripulación es mixta y no tengo la agilidad que tenía con 30 años. La edad pesa, pero lo importante es que poco a poco vamos mejor.

¿Cómo es el Nacra?

Combina la velocidad de un catamarán con la locura de un 49 (clase 49 er). Es muy inestable, muy rápido en la forma de navegar. Tiene cambios muy bruscos. Llega a volar y es un poco arriesgado. De hecho hay muchos lesionados y ese es uno de los problemas que está teniendo.

¿El hecho de que sea una tripulación mixta también es un reto?

Sin duda. Es un reto para el hombre y para la mujer. Es de los pocos deportes mixtos que habrá en los Juegos. Es un barco muy duro físicamente que lleva al límite a todos. Tara (Pacheco) está haciendo una labor increíble porque es muy trabajadora y está todo el día pensando en el barco. Se parece mucho a Antón (Paz, con el que fue campeón olímpico en Tornado en Pekín 2008).

"Cuando decidí volver fue porque me apetecía navegar. No quería ver los Juegos desde una lancha"

¿Tara Pacheco es Antón Paz en mujer?

Sí, sí. Se asemejan. Es muy trabajadora. Estos días (se refiere a Antón Paz) está aquí en Palma (Fernando Echávarri se encuentra preparando el Trofeo Princesa Sofía) echando una mano a la gente que entrenaba yo antes y lo veo. Mantengo muy buena relación con él. Somos muy amigos y seguimos muy de cerca la evolución del otro. La verdad es que Tara es como él. Es muy trabajadora. Lleva toda la parte de la proa del barco como hacía Antón en el Tornado. Ha pasado de ser la patrona en el 470 a ser tripulante en el Nacra sin ningún tipo de problema. Se ha adaptado bien. Es sorprendente la fuerza que tiene con lo pequeña que es.

¿Quedarse fuera de los Juegos de Londres tras hacer un esfuerzo descomunal por adaptarse a la clase Star le generó dudas de cara a un nuevo ciclo olímpico?

En el deporte no siempre se consigue lo que uno quiere. De la preparación olímpica de Londres guardo un buen recuerdo a pesar de no conseguir la clasificación. Fue un cambio radical. Fue como pasar de conducir una moto a un coche porque eran barcos que eran totalmente distintos. Tuve que ganar 16 kilos de peso y tuvimos una evolución brutal. Llegamos a ganar un Campeonato de Europa y nos quedamos fuera de los Juegos empatados con los griegos. El Mundial fue desafortunado por culpa del choque que tuvimos. Cuando decidí meterme en esto el reto fue brutal porque estamos luchando por ir a los Juegos contra una tripulación muy buena (Íker Martínez y Julia Rita). El que vaya a los Juegos lo hará muy bien.

¿Es más duro clasificarse para los Juegos que luchar por una medalla?

Probablemente. El que vaya a los juegos tendrá opciones de cualquier cosa porque estamos hablando de dos tripulaciones muy buenas. La lucha en esta selección está siendo tan dura como los propios Juegos. Esta competencia nos eleva el nivel de cara al futuro. Ahora en Palma y Hyéres (son las últimas pruebas del proceso de confección del equipo nacional) tenemos que estar entre los ocho primeros.

Ha tomado ventaja en el Mundial y queda el Sofía y el Hyéres, dos regatas con características distintas.

Son dos regatas que conocemos muy bien porque llevamos mucho tiempo en esto. Son dos regatas en las que habrá todo tipo de condiciones. Ambas tripulaciones coincidimos en que no debemos pensar en los Juegos, sino estar entre los mejores. Nadie podía pensar que podía estar tan arriba y si lo he conseguido es porque sabía que podía conseguirlo porque era realmente lo que me apetecía. El objetivo es pelear por ganar regatas.

¿Se ve compitiendo en sus terceros Juegos Olímpicos?

Sí. Yo creo que se puede conseguir. No descarto nada. Sé que teneos que trabajar mucho, pero sí que si estamos en los Juegos tendremos opciones de pelear por el podio. Sin duda me he metido en esto para estar en los Juegos Olímpicos.

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