Javier Márquez se despidió este martes de manera pública del que ha sido su club durante la última temporada, el Club Cisne Balonmano, en una comparecencia en la que aseguró que siempre le estará agradecido al club por "darme la oportunidad de estar en Asobal, de disfrutar de mi mayor hobby en una ciudad como Pontevedra y de poder hacerlo de forma tranquila y con un trabajo que siempre he intentado que fuese el mejor".
El técnico manchego estuvo arropado por el presidente, Santiago Picallo; su segundo entrenador, Santi Garrido; el capitán del equipo, Javi Vázquez; y una amplia representación de jugadores y del resto del cuerpo técnico como Sergio Rey y Toño Lafuente. De estos últimos aseguró que, pese a que él no los eligió, considera que "el club tuvo un grana cierto a la hora de colocar a mi lado a Santi, Sergio y Toño" y que en el trabajo realizado "ellos son muy partícipes".
Sin embargo la no consecución del objetivo de lograr la salvación ha sido determinante para dar un paso al lado y dejar, de manera consensuada, el puesto de entrenador. Un descenso de categoría para el cual no quiere "poner excusas". "Hace poco un integrante del cuerpo técnico dijo que quizás este año habíamos visto la salvación como una ilusión y no como un objetivo", explicó Márquez que aseguró que cree que "ahí desviamos un poco el foco y no fuimos capaces de haber dado más de nosotros".
"Gracias por dejarme disfrutar de mi mayor hobby y de poder hacerlo de forma tranquila", afirmó el manchego
Y es que el entrenador blanco, que este sábado dirigirá su último partido en el Cisne, asegura que "ha habido lesiones, ha habido errores y aciertos, pero creo que teníamos en nuestra mano hacer más y creo que en el mundo del deporte hay que ser exigentes y que podíamos haber hecho más. Ha habido partidos en los que hemos sido Doctor Jeckyll y Mister Hyde y ese es el mayor problema que hemos tenido".
Pese a no ser capaz de conseguir el objetivo y despedirse del puesto de técnico de la entidad pontevedresa, Márquez tiene claro que "los jugadores veteranos han dado un paso adelante y los jóvenes han hecho un gran año para seguir creciendo". Además quiso "agradecer a la directiva por la posibilidad de trabajar con toda la tranquilidad del mundo, por poner en mis manos el equipo y el trato que se me ha dado desde el punto de vista personal ya que he estado gran parte del año solo y no me he sentido como tal".
Por su parte el presidente del Cisne aseguró que "es de justicia despedir a Javier" y es que "las circunstancias de la parte deportiva y económica son las que generan la decisión de contratar a un entrenador o en este caso de que no continúe", pero se mostró "agradecido" por el trabajo de Márquez.
"Su paso por aquí se ha notado y se va a notar en el futuro ya que estamos contentos de como fue pese a que las circunstancias adversas que hemos tenido han hecho que no cumplamos el objetivo del año, el que él tenía en su cabeza". Picallo dejó claro que descender "no nos causa ningún trastorno" y que pese al descenso "quiero darle las gracias al técnico ya que lo hemos pasado bien y hemos logrado triunfos importantes".
Santi Garrido, en nombre del cuerpo técnico y como hombre de confianza de Márquez, y Javi Vázquez, en representación de los jugadores, también tuvieron palabras de agradecimiento para el entrenador manchego por lo aportado "en lo profesional y en lo personal".