Pontevedra estará presente en Cheste para apoyar a Lorenzo y a Rossi

El desenlace del Mundial de Moto GP se acerca y la tensión se palpa en el ambiente. El próximo domingo se vivirá en el Circuito de Cheste la madre de todas las batallas sobre dos ruedas, en una cita que algunos ya han catalogado como "la carrera del siglo". Jorge Lorenzo y Valentino Rossi serán los dos pilotos que se enfrenten sobre el asfalto valenciano por la conquista del título, en medio de un clima general de crispación por los últimos acontecimientos acaecidos entre el piloto italiano y el catalán Marc Márquez.

El circuito valenciano de Cheste colgó el cartel de ‘Sold out’ hace semanas, por lo que todos aquellos que disponen de una entrada deben saber que tienen un preciado tesoro entre sus manos. Este es el caso de Óscar Gómez, Manuel Vilidanes, Alberto Castro y Pablo García que acudirán desde Pontevedra a vivir el último gran premio de motociclismo de la temporada.

"Hace casi dos meses que tengo la entrada, ahora están agotadas. Tuve una suerte tremenda, hice bien en cogerla en aquel momento porque al poco tiempo volaron. La compré en El Corte Inglés para Tribuna Roja y me costó 52,50 euros", comenta Óscar.

En Internet la reventa oscila entre los 250 euros de la entrada más barata, hasta los 4.000 euros de los palcos VIP, unos precios que no dejan indiferente a nadie. "Yo no vendería mi entrada por nada", sostienen Pablo y Alberto. En cambio, a Óscar y Manuel les entran las dudas. "No sé si la vendería, hay que verse allí, igual si me dieran mil euros el domingo, después de ir a ver las sesiones de entrenamiento de viernes y sábado me lo pensaría", comenta Manuel.

Los cuatro son primerizos en el Circuito de Cheste, aunque ya conocen lo que es vivir un gran premio de Moto GP. Para esta ocasión, tanto Manuel como Óscar optarán por quedarse en una zona de acampada. "Vamos a un cámping que hay en el pueblo valenciano de Cheste, el del circuito económicamente se nos iba de precio. Además, en el pueblo es donde realmente va a haber ambiente festivo. Si te tienes que desplazar desde el camping del circuito hasta Cheste hay 10 o 15 kilómetros y te arriesgas por el tema de los controles", comenta Óscar.

Alberto y Pablo, en cambio, optarán por las comodidades de un apartamento. "Vamos con algún niño, y por el tema de las duchas y todo preferimos esta opción", explica Alberto.

Respecto al incidente que ha desatado la polémica en los últimos días, el choque entre Rossi y Márquez que terminó con la caída del catalán, cada uno tiene su particular punto de vista.

Óscar, seguidor de Dani Pedrosa, reparte responsabilidades. "Para mí los dos tuvieron culpa, cada uno en su medida. Si Rossi se hubiera callado el jueves en rueda de prensa, Márquez no habría actuado como actuó en carrera y no habría provocado a Rossi como lo provocó", indica.

Para Pablo y Manuel, seguidores de Rossi, el italiano es el perjudicado de la película. "Márquez estaba frenándole en lugar de hacer su carrera, estaba rodando para ser tercero o segundo, y en cambio se dedicó a ralentizar a Rossi", comenta Pablo.

"Cualquiera que se ponga un traje y con esa inclinación en la moto sabe que no es capaz de dar una patada", explica Manuel, quien señala que la rivalidad entre ambos pilotos viene de antes. "Márquez tenía una espina clavada con Rossi. Hizo doce o trece adelantamientos en los que se pudo ir al suelo cualquiera. Lo que estaba claro es que alguno de los dos no iba a terminar la carrera, según vi la salida lo dije".

Asimismo, Alberto, seguidor de Lorenzo, estima que sí hubo agresión y considera muy blanda la sanción a Rossi. "Para mí es escasa de todo, tenían que haber sacado bandera negra en el mismo momento en que tiró a Márquez. Es lo mismo que en otros deportes, en un partido de fútbol sería tarjeta roja y expulsión", dice.

El piloto de Yamaha recurrió esta sanción y ahora es el TAS el que debe decidir en las próximas horas. "Si no se la quitan va a ser el mundial que Márquez le dio a Lorenzo, no el Mundial que ganó Lorenzo", comenta Pablo. "No es así, porque Lorenzo luchó bien y limpio todo el año. En la última carrera no se gana un mundial", replica Alberto.

En los últimos días fueron muchos los aficionados del motociclismo, sin fortuna, que han intentado hacerse con una entrada para el Gran Premio de Valencia. Es el caso de Rocío Martínez y de Cristina Pérez, que esta temporada asistieron a los grandes premios de Jerez y Montmeló respectivamente y que, sin embargo, tendrán que conformarse con seguir la carrera de Cheste desde la distancia.

"Intentamos comprar alguna entrada pero miramos en diferentes webs y estaban todas agotadas, ni en El Corte Inglés ni en ningún establecimiento físico quedaban. En la reventa los precios están disparados y encima no tienes la seguridad de que sean verdaderas, si son falsas pagar tanto para nada…", comenta Rocío.

En la misma situación se encuentra Cristina, quien considera "excesivo" el precio que han alcanzado los precios en la reventa.

"Pienso que es excesivo porque hace unos meses la entrada más barata era de 40 euros aproximadamente. Pero dado que es la última carrera y el Mundial se va a decidir este domingo, junto a lo que pasó en el último gran premio entre Rossi y Márquez la gente estará dispuesta a pagar esos precios", explica Cristina.

Estas dos aficionadas, muestran también opiniones contrapuestas respecto a lo sucedido en el circuito de Sepang. Rocío, fiel seguidora de Rossi, sale al paso de las voces que dicen que se ha caído un mito. "Cualquiera tiene un mal día, los que son del Barça no dejan de ser del Barça porque sus jugadores se peleen en el campo o cometan un error, pues para mí igual", explica.

Sin embargo, Cristina, seguidora de Marc Márquez, se muestra muy crítica. "Valentino me ha decepcionado como piloto y como persona, al igual que a mucha gente más", dice. Además, respecto a la sanción impuesta al italiano, la considera insuficiente.

"No es una sanción que realmente le perjudique, ya que salir de último para un piloto como Rossi no supone un gran inconveniente. Está claro que va a situarse entre los cinco primeros nada más empiecen a rodar", explica.

Rocío verá el desenlace del Mundial junto con un grupo de amigos en un bar. Tiene claro cuál es su deseo para el domingo: "Que Rossi gane el mundial y que se de la mano o un abrazo con Márquez para firmar la paz". Por su parte que Cristina disfrutará de la última carrera del campeonato junto con su hermana y su padre en casa. "Quiero que Lorenzo gane el mundial y que Márquez, esta vez, pueda terminar la carrera".