PONTEVEDRA. El comienzo dubitativo del Pontevedra no tuvo consecuencias negativas en la clasificación para el equipo que dirige Nando. La gran igualdad que reina en la Tercera División en el presente curso impidió que ningún contrincante importante se le escapara en la clasificación. El triunfo contra el Grixoa en la tercera semana permitió, además, que el cuadro lerezano se enganchara al pelotón perseguidor del líder, el sorprendente Arosa.
La escuadra granate está a un triunfo de distancia de la primera posición, el gran objetivo de la Liga que le permitiría disponer de una doble oportunidad para poder ascender en los meses de mayo y junio.
Ninguno de los otros favoritos o grandes candidatos a disputar la fase de ascenso hizo pleno de puntos. De hecho, todos perdieron algún enfrentamiento, excepto el Boiro, el Cerceda y el As Pontes. O Barbadás y el propio líder, el Arosa, tampoco cayeron en ningún envite hasta el momento, aunque a priori ninguno de los dos onces tiene en mente pelear por acabar entre los cuatro primeros. Son dos de los tapados del presente ejercicio.
El Deportivo B y el Villalbés tienen seis puntos ambos. Los lucenses perdieron en la primera jornada y los coruñeses, en la segunda. Los antes mencionados Boiro (recén ascendido con un plantel hecho la base de talonario y plagado de calidad), As Pontes y Cerceda (una de las incógnitas de la Liga) cuentan con un sólo punto.
El Órdenes y el Rápido de Bouzas suman cuatro puntos, los mismos que el Pontevedra. El Somozas sólo tiene dos, resultantes de dos igualadas, y se encuentra dentro del reducido grupo de equipos que aún no estrenó el recadro de las victorias.
La actual Liga comenzó como una de las más equilibradas de los últimos tiempos. Además de que no se escapó ningún conjunto desde el principio (cómo hizo el año pasado el Racing de Ferrol o el Cerceda en su etapa de mayor rendimiento), tampoco hay ningún cuadro con cero puntos. Además, los tres últimos son los únicos que aún no vencieron.
Hay bastantes bloques que no perdieron (cinco), pero la mayor parte de ellos sumaron dos empates en tres enfrentamientos.
De tal manera, la diferencia entre el líder y el colista es de seis puntos, la más baja desde la temporada 2008-09 (de aquella fue exactamente a misma).
Aparte, la zona de fase de ascenso y la de descenso están separadas por menos de un partido. El cuarto tiene cinco puntos; el cuarto por la cola, tres. Es decir, si ganara la próxima jornada, el Dorneda podría pasar por delante del Boiro, cuando en la actualidad el conjunto de Oleiros está sumergido en las últimas plazas y el del Barbanza ocupa una posición de privilegio.
La liga no ha hecho más que empezar, pero el rendimiento de los participantes da a entender que el equilibrio será la tónica en varias frentes: la primera posición, la pelea por la fase de ascenso y la de la permanencia. Eso sí, si hay lógica, acabará habiendo distancias entre los conjuntos que pelean por esos tres objetivos.
