Dani Pendín llevaba esperando hasta este miércoles para saber si podría jugar contra el Cacereño, y una vez reconocido por los doctores, vista la evolución de su operación en el rostro y su estado, la máscara podría convertirse en su principal hándicap para poder actuar el fin de semana.
El largo periodo de elaboración de la protección impedirá que pueda trabajar este jueves con sus compañeros y le reducirá el margen de maniobra para ponerse a tono y viajar a Extremadura.
(Más información en nuestra edición impresa del 31 de marzo).
