Teresa Portela, la reina del piragüismo sin medalla olímpica

En su extensa carrera deportiva la canguesa ha logrado 30 medallas en Europeos o Mundiales y en Londres se quedó a dos centésimas del podio
Teresa Portela
photo_camera Teresa Portela

El deporte es propenso a injusticias. Si hubiera justicia, Teresa Portela Rivas (Cangas, 1982) tendría en su palmarés una medalla olímpica, esa para la que era favorita en Atenas 2004 -formando parte del K4- y que acarició hace cuatro años en Londres en el K1. Se quedó a un suspiro de hacer realidad su sueño porque es, sin ningún tipo de dudas, la mejor piragüista española de la historia con la friolera de 30 medallas en campeonatos de Europa y del Mundo.

Este martes disputaba su quinta final olímpica. Un dato elocuente, que a la vez es la misma cantidad de veces que ha participado en unos Juegos, igualando a la tenista Arantxa Sánchez Vicario, a la esquiadora María José Rienda y a la nadadora María Pelaez. Con 18 años recién cumplidos acudió a Sídney 2000 ya que su trayectoria como júnior le situaba como una de las principales esperanzas del piragüismo. Su momento llegó en la Olimpiada que desembocó en los Juegos de 2004. Fue en ese ciclo cuando logró una de sus mayores proezas: proclamarse campeona del mundo de K1 en la distancia de 200 metros, en Sevilla en 2002.

La canguesa demostraba que era la mejor velocista del mundo. Sus medallas en esa distancia no olímpica fueron acumulándose. Cada Campeonato de Europa o del Mundo significaban nuevos podios, aunque siempre con la frustración de que en la gran cita, la de los de los Juegos, tendría que centrarse en barcos colectivos.

En Atenas 2004, vivió una de las mayores decepciones de su vida. Tras un brillante Mundial en 2003 y el Europeo de 2004, las expectativas sobre el K4 crecieron de manera espectacular. En todos los pronósticos figuraba esa medalla, pero el barco fue quinto, lejos de las esperanzas. Tras la cita griega dio un golpe en la mesa dejando claro que de cara a Pekín 2008 quería centrarse en el K1 bajo las órdenes del que había sido su entrenador en la época de formación, el pontevedrés Suso Morlán, pero todo aquello acabó en un tormento.

Las opciones de estar en Pekín pasaron por clasificar el K4, por lo que la Federación recuperó a la retirada Sonia Molanes y el entrenador fue su marido. La experiencia china dejó la buena noticia de una ilusionante participación en la prueba individual, ya que sin haberse centrado en ella estuvo entre las mejores. Era la confirmación de que su talento individual se había desaprovechado a costa del grupo durante mucho tiempo.

La deseada decisión, en 2009, de convertir en olímpica la distancia de 200 metros le generó unas nuevas expectativas. Es posible que la medida de la Federación Internacional llegara tarde, porque en Londres 2012 tendría 30 años, pero aumentaban de manera considerable las posibilidades de colgarse una presea olímpica. Se acercó más que nunca a ella en una prueba en la que una puede perfectamente acabar en los puestos de podio o ser sexta. En un suspiro están las mejores. Entre la gloria y la ilusión hay una línea muy fina.

Después de Londres hizo realidad otro de sus deseos: ser madre. Compitió hasta pocas semanas antes de dar a luz a Naira y un mes después de hacerlo ya estaba de nuevo encima de una piragua con la que logró la medalla de bronce en el último Mundial, el de 2015. Dicen que ha sido la que más ilusión le ha generado de su larga carrera deportiva.

Con o sin medalla olímpica, Teresa Portela es la mejor deportista gallega de la historia y una de las mejores a nivel nacional. Todo un ejemplo por su trayectoria y su comportamiento. Sabe que hay un después tras la retirada y por ello obtuvo el título de maestra infantil y se sacó la licenciatura de Fisioterapia. Un dato que pone de manifiesto su formación.

Con 34 años, ha vivido sus quintos Juegos Olímpicos y nunca ha hablado abiertamente de la retirada. En Tokio, tendría 38, pero de ella se puede esperar cualquier cosa, porque ha demostrado que es capaz de transformar lo difícil en posible.

Más en Deporte Local Pontevedra
Comentarios