PONTEVEDRA. Los árbitros de veteranos han decidido plantarse ante el último caso de violencia protagonizado por el SCD Xocas. Los colegiados de la competición organizada por la Sociedad Cultural y Recreativa de Fútbol Veterano de Pontevedra se reunieron el pasado miércoles por la noche para tomar una decisión sin precedentes: no enviar a ningún miembro del colectivo a los encuentros en los que participe la escuadra vilagarciana.
La determinación fue asumida por mayoría absoluta de los presentes en la junta, como informó el máximo responsable del colectivo, Muíños. De hecho, la simple propuesta de la medida, antes de ser votada, fue acogida con una cerrada ovación de un minuto.
La decisión fue notificada al presidente del comité organizador de la competición, José Luis Pazos, ayer por la tarde.
El motivo de la misma fue el último caso de violencia en el que se vio implicado el cuadro vilagarciano, el pasado sábado, en el envite contra el San Adrián. Uno de los futbolistas del bloque agredió de forma brutal al colegiado que se encargaba de controlar el enfrentamiento, que debió recibir atención médica después de recibir una patada de kárate y varios golpes más con el pie cuando se encontraba tirado en el suelo.
Sin embargo, según aclara el colectivo arbitral, este caso no es el auténtico motivo. Simplemente es la gota que colma el vaso. «Se se tratase dun lance puntual, non sería o mesmo. Pero é algo que sucede de forma reitarada tódalas temporadas. Isto non foi unha situación aillada», aclara el portavoz de la agrupación de colegiados.
Sanción cautelar
En ese sentido, el colectivo arbitral quiso dejar claro que otro factor había influido en su decisión. La sanción al jugador infractor por parte del comité de competición no lo satisfizo, ya tiene carácter cautelar. La falta de firmeza en el castigo no agradó a los trencillas, que se sienten desprotegidos e intimidados cuando tienen que dirigir los envites en los que participa el SCD Xocas.
«O que estamos intentando evitar é que se produzan sucesos coma o do sábado pasado. Non queremos lamentar que algún árbitro quede no campo. Chega un momento que hai que dicir basta.Este é o momento», expresó el representante del grupo de jueces de campo de la Liga de Veteranos de Pontevedra.
Además, la agrupación se vio respaldada por varias escuadras de la misma categoría en la que participa el conjunto vilagarciano, que se plantearon la posibilidad de no acudir a los envites en los que debiesen medirse al Xocas. Finalmente esa medida no se llegó a plantear de forma oficial, después de varias conversaciones privadas entre delegados de algunos equipos del grupo 2-B.
Los colegiados quisieron dejar claro que no se trataba de un boicot a la competición ni al comité organizador, sino exclusivamente a un bloque que, según su perspectiva, excede los límites del comportamiento permisible en un campo de fútbol.
«É só un equipo. Os demais conxuntos, en xeral, teñen un comportamento correcto e a competición funciona ben a nivel organizativo».
De hecho, existe la posibilidad de que en algún momento cambien de parecer. La aplicación de la decisión será sine die, es decir, no tiene por qué ser para siempre, aunque para que den marcha atrás debería producirse un cambio radical en algunos aspectos disciplinarios y en el propio Xocas.
