Protagonistas del Lérez

La historia del Club Naval de Pontevedra se remonta al año 1932. La veterana formación de la ciudad del Lérez contó en su momento con las secciones de remo, vela, natación o waterpolo, aunque ahora se centra exclusivamente en la actividad de piragüismo, convirtiéndose en uno de los clubes más exitosos de Galicia.

El deporte de la pala tiene gran tradición en la provincia y el Club Naval cuenta con una de las principales canteras de piragüistas. Esta temporada, la entidad está representada por 74 deportistas de todas las categorías. El número aumentará en la época estival, tal y como explica el presidente del club, José Carlos Paz: "El año pasado terminamos con más de 90 licencias. A partir de mayo y junio viene más gente porque en verano captamos a más chavales". Entre los motivos se encuentra la organización de cursos de verano destinados a los pontevedreses que quieran probar sus cualidades en este deporte, así como a la labor de información en colegios de la ciudad.

Carlos Paz ha sido recientemente reeligido por los socios para continuar al mando del Club Naval durante cuatro años más. Así, Paz cumplirá doce temporadas al frente de la entidad, aunque previamente ya había ejercido como vicepresidente y presidente de la gestora.

Durante su mandato, el equipo sénior se marca el claro objetivo de continuar en la máxima categoría del piragüismo nacional. "Si las cosas van bien, como el año pasado, tal y como tenemos previsto, nuestro objetivo es mantenernos en la División de Honor. Por el momento nos ha ido bastante bien", comenta Paz.

Desde la orilla del río Lérez, el recorrido de las canoas y kayaks capta la atención de los paseantes. "A veces pasan turistas por aquí y nos preguntan si pueden alquilar una piragua", comenta el mandatario divertido. "Alguna vez hemos dejado probar a algún paisano porque le hacía mucha ilusión. Le dejamos que remase un poquito, pero nosotros no nos dedicamos a eso", añade entre risas. "A los socios del club sí se las dejamos para que disfruten cuando no estamos en época de competiciones, pero si no, nos dedicamos a la competición".

CANTERA. El Club Naval trabaja pensando en el futuro. La labor de la cantera es uno de los aspectos deportivos más importantes y el equipo cuida con mimo a los jóvenes. "Con las categorías base consigues que se vaya manteniendo el club porque los chicos van llegando a las superiores. Nosotros potenciamos la base con gente joven porque los más mayores se marchan a estudiar y van finalizando su vida deportiva", explica Paz.

Para ello, el club cuenta con un entrenador para los más pequeños y otro para los mayores. En el Naval entrenan todos los días de la semana en las aguas del Lérez, excepto los domingos. Los pequeños se ejercitan tres días a la semana de 17.00 a 18.30 horas y después comienzan las sesiones de los palistas sénior. Cuando llega el verano, la ‘temporada alta’ de competiciones, acuden a las regatas los fines de semana y las instalaciones del club permanecen sin actividad.

El principal escollo para la entidad pontevedresa es, como suele ser habitual, la financiación. "Como siempre, estamos pendientes de las subvenciones. Trabajamos en eso. Pero ese es un mal que tienen todos los clubes deportivos en general", comenta el presidente con una sonrisa de resignación. "Estamos pendientes de las ayudas públicas y de patrocinadores privados y empresas que nos echan una mano. Eso es lo que nos va salvando un poco, como a todos", concluye.

El Club Naval de Pontevedra continuará escribiendo páginas en su extensa historia, siempre vinculados a la promoción del piragüismo en la ciudad y a los éxitos deportivos.