Los desafíos son la gasolina que mueven a aquellos equipos que buscan la excelencia. Los que quieren sumar de tres cada jornada, mantenerse en alza y ser, cuanto antes, los mejores. La visita del Pontevedra al Estadio Municipal de Miramar (17.00 hora) es un auténtico reto. Porque lejos de lo que pueda indicar la clasificación -el Marino de Luanco es actualmente el décimo segundo clasificado-, el feudo asturiano es uno de los más resistentes ante los favoritos.
"La gente del pueblo anima mucho, meten gente en el campo, aprietan", analizaba Yago Iglesias sobre la salida de su equipo en esta nueva jornada de Segunda Federación. Lo cierto es que los pupilos de Sergio Sánchez se han ganado su buena fama a pulso. Sin resultados extraordinarios, pero ofreciendo una gran oposición, el cuadro asturiano se ha consolidado como uno de los más difíciles de batir ante su gente. De los cinco partidos que ha disputado el Marino de Luanco hasta la fecha como local, en cuatro de ellos se midió a equipos de la zona alta de la clasificación o aspirantes a estar en ella. Curiosamente, su única derrota se dio contra el de menor rango en la tabla: la Gimnástica Torrelavega, mismo verdugo que el del Pontevedra.
El resto de partidos los cuenta todos puntuando, aunque solo haya conseguido una victoria. Un triunfo que impulsa ahora las aspiraciones de los asturianos, que precisamente sumaron de tres por primera vez en Miramar en el último duelo de liga. Fue ante el Guijuelo, habitual en los puestos de play-off desde que comenzó la competición. Ante Langreo (7º), Deportivo Fabril (8º) y SD Compostela (9º), los de Sergio Sánchez sumaron un punto en cada encuentro.
"Para ganar a un equipo como el Marino de Luanco tenemos que ser nosotros mismos, adaptándonos a las circunstancias que nos podamos encontrar, pero ser una mejor versión de las jornadas anteriores", declaró Yago Iglesias. Para el técnico, lo "igualada" que está la categoría (al término de la jornada 10 había seis puntos entre play-off y play-out) es un indicativo de que su equipo no debe confiarse ante ningún rival. Ni por nombre, ni mucho menos por la posición que ocupe en la tabla.
Así, los granates asumen con ganas el desafío de echar abajo un Municipal de Miramar que solo ha conseguido asaltar la Gimnástica Torrelavega. Ante los equipos de la zona alta, el Marino de Luanco está demostrando una gran dinámica. Pero el Pontevedra ya ha derribado muchos muros en lo que va de competición.
regularidad. Ninguna derrota cosechada a domicilio endulza la visión del conjunto granate. Los pupilos de Yago Iglesias han demostrado ser un cruel visitante: dos victorias y tres empates lejos de Pasarón suman nueve de los 19 puntos de su casillero.
En Miramar, el cuadro lerezano buscará ir un paso más allá y añadir tres a su cuenta personal, tras dos jornadas empatando. La regularidad de los granates se está viendo recompensada, pero la eficacia de sus rivales aprieta en una clasificación muy ajustada. Para seguir enganchado a los puestos nobles, el Pontevedra debe procurar una victoria en su duelo en Asturias.
"Vamos a Marino sabiendo de la dificultad, sabiendo que es un campo muy complicado, que las condiciones climatológicas nos van a condicionar seguramente", explicó Yago Iglesias en la previa del duelo, "pero con las ideas claras". Y es que si algo está seguro en el Pontevedra es a lo que quiere jugar. El empate en Pasarón ante el Rayo Cantabria supo a poco para un conjunto que protagonizó el partido con más disparos a portería de lo que va de competición liguera.
Ese es el camino a seguir para un Pontevedra que quiere mantener su esencia y sobre todo, hacer de las victorias algo regular para poder alcanzar cuanto antes la cima. Para ello podrá contar, casi con total seguridad, con el apoyo de un Borja Domínguez que volverá a una convocatoria tras su lesión en la primera jornada.
Recupera efectivos Iglesias para, quizás, tratar de sorprender o dar frescura al equipo durante el partido. Lo cierto es que el ribeirense ha encontrado en su baraja el once ideal, que está rindiendo a un gran nivel. Si bien los rivales ya empiezan a cogerle el truco, a Iglesias esto no le preocupa: "Es cierto que muchas veces los equipos cuando va a jugar el Pontevedra cambian ciertas cosas, pero creo que no encontraremos mucho cambio esta vez".
Los granates esperan que la situación climatológica no condicione el césped en un partido decisivo: la victoria del sábado del Ourense lo catapulta a la primera plaza y el triunfo del Racing Villalbés recorta distancias a los lerezanos.
