Marko Dzokic, tras conocer su diagnóstico de cáncer: "Ahora comienza la lucha de verdad"

El jugador del Teucro asegura sentirse "animado y con fuerzas" para enfrentarse al cáncer testicular que padece pese a que en el momento del diagnóstico "fue duro escucharlo"
Marko Dzokic. BEATRIZ CÍSCAR
photo_camera Marko Dzokic. BEATRIZ CÍSCAR

Le toca afrontar una complicada situación y enfrentarse a una dura batalla que se inicia después de meses de incertidumbre y diversas cirugías, pero el jugador del Teucro, Marko Dzokic, asegura sentirse con fuerzas y ánimos para ganarle la batalla al cáncer testicular que le fue diagnosticado. "Ahora comienza la lucha de verdad", afirma él que sabe que es una pelea para la que "hay que prepararse, estar bien de cabeza, ser positivo, tener paciencia y seguir luchando. No queda otra". Y es que en cuanto a positivismo nadie le gana.

"Estoy animado y con fuerzas y es que, al final, al llevar tres meses con esto a vueltas te acabas mentalizando de que puede haber esa opción. Piensas que puede no ser nada o que puede ser algo malo realmente", afirma el capitán teucrista que confiesa que "cuando el martes me dan la noticia sí que en el momento fue duro escucharlo, pero también esperas que te cuenten que dentro de lo malo sea lo más positivo posible".

Y es que ahora, realmente, comienza el camino más duro para Dzokic que no estará solo ya que contará con el apoyo de su familia que le acompañará en este camino que inicia hacia la recuperación. "Mi madre ya lleva aquí dos meses conmigo y ahora vendrán mi hermano y mi padre para estar en familia", subraya el jugador balcánico.

Una lucha que comenzará volviendo a pasar por quirófano ya que "la doctora me dijo que en el momento que me sacaron los tubos espermáticos no los sacaron del todo, sino que pararon en un punto y en los análisis salieron que había células cancerígenas en esos que extrayeron"», explica Dzokic que destaca que "ahora tienen que volver a entrar para sacar todo lo que queda de tubos hasta arriba". Ese primer paso se completará con "quimioterapia", sin embargo "todavía no me han explicado cuantas sesiones tendré que hacer ni nada por el estilo", destaca el teucrista.

"NO VEÍA EL FINAL". El propio Dzokic es consciente de que terminó una lucha y ahora comienza otra, pero el hecho de tener el diagnóstico definitivo permite focalizarse en la recuperación ya que, durante los tres meses que pasó entre médicos y operaciones "no veía el final, cada semana era una cosa diferente".

Todo comenzó a principios de marzo cuando "me hacen la primera intervención por lo que parecía un torsión, que finalmente se quedó en parcial". En ese momento Dzokic llevaba "varios días con molestias, pero no fue hasta el momento en el que noto dolor cuando voy a urgencias".

La noche del 11 al 12 de marzo le practican la primera cirugía en la que "estaba la posibilidad de que me sacasen el testículo", algo que finalmente no fue necesario ya que "deciden dejarlo para ver como evoluciona". A las pocas semanas de esa primera operación el balcánico continuaba con molestias y "deciden dejarme ingresado por una infección, una epididimitis, en los tubos espermáticos".

Es a raíz de esa infección cuando le comunican que "me tienen que quitar el testículo", una extracción que se produjo hace un mes aproximadamente y en la que también le sacaron parte de los tubos espermáticos. En un primer momento parecía que todo había salido bien ya que el jugador tenía buenas sensaciones en los días posteriores. Sin embargo "vuelvo a tener  una nueva infección en una de las cicatrices por donde me sacaron los tubos y tuve que estar cuatro días en el hospital", explica.

"Al llevar tres meses así te mentalizas de que puede pasar. Hay que ser positivo y seguir luchando. No queda otra", destaca Dzokic

"Ese digamos que fue el último de los cuatro momentos clave, y duros", destaca Dzokic que lo resumen en "dos cirugías y dos infecciones". El quinto momento duro llegó con el diagnóstico final, un momento complicado al que el capitán teucrista responde con una actitud positiva y muchas ganas de luchar.

APOYO. Pero no estará solo en esta pelea ya que desde se conoció la noticia el jugador azul ha recibido un gran número de muestras de apoyo y cariño, tanto de sus amigos y familiares más cercanos como del mundo del balonmano. 

"El martes estuve todo el día contestando mensajes y aún me quedan unos cuantos por responder"», afirma el balcánico que reconoce que "ese apoyo se agradece un montón y ojalá no fuese algo así, pero cada mensajito es un empujón más".

Una ayuda extra en una pelea que Marko Dzokic confía en ganar y es que, tal y como asegura, "todo va a salir genial, es un trámite y ya está".

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