PONTEVEDRA. Nando respira aliviado. El entrenador valenciano del Pontevedra pasará los dos próximos partidos en la grada, como consecuencia de la sanción que ha dictaminado el comité de competición de la Federación Española de Fútbol. El técnico aguardaba un castigo superior, a tenor de lo que el colegiado reflejó en el acta del partido disputado el pasado domingo entre su escuadra y el Bertamiráns. Según el documento oficial del encuentro, el técnico faltó al respecto al trío arbitral diciendo «sois unos sinvergüenzas», hecho que niega rotundamente el preparador.
«La sanción es la que esperaba en base a lo que yo dije. No por lo que ponía en el acta. Si fuese por ella, podrían haberme caído más partidos. Pero tengo la conciencia tranquila, ya que en ningún momento dije las palabras que ellos indican».
Al mismo tiempo, el preparador realiza autocrítica y manifiesta que debe moderar sus gestos y su carácter en el banquillo para evitar más expulsiones en futuras ocasiones.
«Estoy contento y espero que no ocurra esto más veces. Tendré que tener más tranquilidad a la hora de gesticular o decir las cosas. Por el temperamento que tengo, eso puede ofender mucho a los colegiados», expresó.
Nando estuvo más tranquilo una vez que fue expulsado, dentro de la cabina de megafonía del estadio de Pasarón, que a pie de campo. Daba instrucciones, el entrenador de porteros las recogía y se las transmitía al ayudante, Manu Fernández.
«El otro día tuve la fortuna de que tenía a mi lado al entrenador de porteros, Jaime, viendo el partido. Desde la cabina no te enteras de todo lo que ocurre en la grada, ya que no se escucha casi nada de sonido ambiente. Incluso por momentos creo que estaba menos nervioso que cuando estuve en el campo. Desde la banda tienes ganas de meterte dentro e intentar ayudar en algunas ocasiones. Igual a veces no hay que realizar tantas indicaciones. Y cualquier cosa que debamos rectificar podía comunicárselo igual a mi segundo», desveló el responsable técnico del cuadro granate.
En cualquier caso, y a pesar de ello, Nando tiene muy claro cuál es su lugar, el banquillo. Por eso insiste en que «si tengo que cambiar la actitud para no tener estos problemas, lo haré».
Mejoría
El entrenador del bloque de Pasarón también habló de su equipo y del margen de progresión que le queda.
«Todavía tiene que explotar en muchos aspectos. Los problemas que hemos tenido contra otros adversarios, recién ascendidos o no, se pueden repetir. Ya se vio contra el Areas, que nos pusimos 2-0 y nos costó. Cuando el equipo alcance una mayor solvencia en el juego ofensivo para hacer daño al rival empezará a funcionar mejor. El otro día, aún así, vi durante los primeros 20 minutos a un conjunto que tuvo mucha paciencia. El bloque ganó en velocidad e intensidad en ataque. Creo que fue justo ganador del partido».
Lo que quiere dejar claro es que las goleadas no serán el pan nuestro de cada día en el Pontevedra. «Si la gente cree que vamos a vencer todos los encuentros con facilidad, se equivoca. Cada vez es más difícil ver eso. Solo hay que ver al Real Madrid, que el otro día tuvo dificultades para ganar en Elche. Ahora parece que no está bien y no es el gran equipo que era. En los clubes grandes, hay urgencia, el objetivo es inmediato y aparte de ganar, la gente quiere ver un buen espectáculo», finaliza Nando.
