CASTELLÓN. Después de dos décadas un representante marinense queda campeón de España de ciclocrós. Irene Trabazo Bragado, del Club Ciclista Marín, cumplió los pronósticos, y se proclamó ayer en la ciudad castellonense de Segorbe campeona de España completando así de una manera sobresaliente la campaña 2013-14 de ciclocrós. La joven marinense de 15 años se llevó el entorchado nacional superando a su rival directa, la cántabra Alba Fernández, en casi un minuto, y en casi dos minutos a la tercera en el puesto del podio, la valenciana Sofía Rodríguez.
Irene Trabazo se presentaba a la cita nacional de Segorbe como campeona de la Copa Federaciones, aderezado con el título autonómico que había conseguido en Dumbría hace pocas fechas y liderando el ranking nacional.
La prueba, que consistió en dar cuatro vueltas a un selectivo trazado 2,8 kilómetros, comenzó con Irene marcando el ritmo y no permitiendo que Alba Fernández le pudiera sacar ventaja. Imprimió un gran ritmo de pedaladas y observó como iba marcando diferencias sobre el restante grupo. Ya en el primer paso por meta tenía una ventaja considerable. Lo importante, a partir de ahora, era calibrar fuerzas y evitar pinchar, principalmente en las bajadas que eran muy pronunciadas. En la segunda vuelta viendo que ni Alba Fernández ni Sofia Rodríguez se le acercaba, no forzó. Ya se veía ganadora aunque restaban más de un cuarto de hora de carrera. Sabiéndose ya vencedora fue regulando esfuerzos y pudo entrar en meta en solitario quitándole 54 segundos a la ciclista cántabra.
Hace veinte años que Marín no tenía un podio nacional, concretamente en 1993 fue cuando otro ciclista formando en la cantera marinense se llevó el título nacional e igualmente cadete; nos referimos a Pablo Pardilla.
Quien mostraba su satisfacción era el entrenador de Irene Trabazo, José Alberto Del Río, que aseguraba que «se lo merecía porque ya lo estábamos preparando desde casi principios del pasado año. Trabajó mucho en carretera, también hizo mountain bike y eso la fue modelando. El trabajo esta ahí, y el fruto es proclamarse campeona de España. Es una trabajadora nata, pero no es cuestión de entrenar y entrenar. Hay que tener madera de sufridora y adaptarse a este tipo de pruebas, y ella lo ha hecho bien y tiene su mérito».
En Marín
Desde Marín, su madre María Carmen Bragado y su hermana María del Pilar Trabazo siguieron a través de facebook el desarrollo de la carrera, a través de lo que le iba comunicando el entrenador. Fueron conociendo el desarrollo de la prueba y al filo de la una del mediodía ya habían recibido el mensaje de que Irene se había hecho con la medalla de oro. Posteriormente madre e hija hablaron por vía móvil.
Restante participación. Esta medalla de oro estuvo adornado con la buena actuación de las otras dos ciclistas gallegas presentes en esta prueba cadete. Andrea Tomé, del Club Ciclista Cambre, y Sara Trigo, del Fundación Óscar Pereiro, se clasificaron en las posiciones séptima y octava respectivamente. El otro puesto de podio de la selección gallega en la jornada de ayer también correspondió a una ciclista, a Desirée Duarte, del Acuagest, consiguiendo la tercera medalla consecutiva en unos Campeonatos de España, en concreto haciéndose con bronce en la carrera de categoría júnior.
Por su parte, en la carrera de categoría Sub 23, Paulo González, de CC Salvaterra, rozó los puestos de podio. Fue finalmente cuarto clasificado. mientras Antonio González, del CC Salvaterra, fue séptimo en Máster 50.
- Irene Trabazo (Galicia) 34 m. 43 s.
- Alba Fernández (Cantabria) 35.37
- Sofía Rodriguez (Valencia) 36.28
- Mireia Muñoz (Vasca) 36.52
- Isabel Martín (Cas-León) 36.52
- Rosalía Ortiz (Madrid) 37.18
- Andrea Tomé (Galicia) 37.32
- Sara Trigo (Galicia) 37.42
- Irene Barreiro (Asturias) 40.09
- Laura Tenorio (Cas-León) 40.19
«Sentí una alegría inmensa al cruzar meta»
La joven Irene Trabazo confesaba ayer en la ciudad castellonense de Segorbe, una vez ganada la medalla de oro en la prueba cadete que «la carrera estuvo bastante controlada. El trazado era peligroso, principalmente por las bajadas en las que había mucha probabilidad de pinchar; no pinché gracias a Dios. En el segundo paso por meta aflojé un poco viendo que la distancia era grande. La verdad es que no me sentí presionada».
Irene Trabazo reconocía que al pasar por debajo de la pancarta de meta «sentí una alegría inmensa. Lo primero que pensé fue en mi entrenador por lo mucho que ha trabajado conmigo. Estoy muy contenta. No todos los días se puede presumir de ganar un título nacional».
Irene Trabazo cierra así una temporada de nota sobresaliente con la Copa Federaciones, título gallego y título nacional.
