El segundo día de grandes finales del Campeonato del Mundo de Sprint que se disputa en la localidad canadiense de Halifax dejó un nuevo metal para la delegación local que cierra su participación en la cita mundial demostrando la buena salud del piragüismo pontevedrés.
Los palistas locales Adrián Sieiro, Manuel Fontán y Pablo Graña, acompañados de Joan Moreno, se colgaron el oro al cuello en la final del C4 500 metros, tras realizar una excelente regata en la que no dieron opciones a sus rivales y demostraron su buen hacer sobre la canoa.
No corrió la misma suerte la pareja grovense formada por Diego y Noel Domínguez que en el C2 1.000 finalizó en el cuarto lugar rozando muy de cerca la medalla de bronce en su primer Mundial remando juntos y demostrando que sobre la canoa se complementan a la perfección y que su primer metal absoluto puede estar muy cerca.
EL ORO PONTEVEDRÉS. No tuvieron que pasar ninguna serie clasificatoria, se jugaban todo el trabajo en una sola regata a ciegas, en la gran final de C4 500 y no defraudaron. El barco con mayor acento pontevedrés de toda la expedición española formado por el poiense Adrián Sieiro, el vilanovés Manuel Fontán y el grovense Pablo Graña dominó la prueba de inicio a fin para sumar la sexta medalla de la delegación nacional y la tercera para Pontevedra.
El barco de los palistas locales extendió el gran momento de embarcaciones que atraviesa la delegación española en este Campeonato del Mundo. Aprovechándose de la ausencia de Alemania en la cita final la embarcación del Graña, Sieiro, Fontán y Moreno mostró un gran fortaleza para cruzar la línea de meta en primer lugar con una marca de 1:39.42 y aventajar en 49 centésimas a la embarcación polaca que se colgó la plata después de una dura pelea con los españoles por hacerse con el primer puesto, llegando incluso a arrebatarle el oro en algunos instantes de una regata en la que finalmente el barco de los pontevedreses tiró de garra y fuerza para cruzar primero la meta.
La medalla de bronce fue para el barco ucraniano -que partía como favorito al inicio de la carrera- que apenas dejó opción al resto de competidores de pelear por la medalla.
Una medalla más que se sumó al casillero nacional y otro metal que se vuelve para Pontevedra cuyos palistas que participaron en el Mundial de Sprint de Halifax firmaron un gran campeonato y demostraron el dominio pontevedrés en el piragüismo.
DOS CENTÉSIMAS. No fueron capaces de unirse a la fiesta los hermanos Domínguez a los que tan solo dos centésimas separaron de la medalla de bronce en el C2 1.000 metros.
En su primer mundial absoluto como pareja de competición lograron colarse en la final haciendo una buena serie clasificatoria y pasando en tercer lugar. Se presentaron a la final con ganas de reivindicarse y estuvieron a punto de regresar con una medalla.
Fueron en cuarto lugar durante casi toda la regata, pero siempre cerca de la embarcación canadiense que se llevó el bronce por detrás de China, que fue plata, y Alemania que se proclamó campeona. Sin embargo y pese a no regresar con la medalla la actuación de los Domínguez se suma al gran Campeonato del Mundo que la representación local hizo en Canadá.
