Para reaccionar, el colista

Manu Ferreiro intenta deshacerse de la presión defensiva de jugadores rivales. alba sotelo
photo_camera Manu Ferreiro intenta deshacerse de la presión defensiva de jugadores rivales. alba sotelo

MARIN. Tras un baremo negativo de tres derrotas consecutivas en la gira de desplazamientos del mes de enero, el Marín Peixe Galego no puede permitirse seguir en esa dinámica. Y menos hoy, cuando llega a Marín (Pabellon de A Raña, 19.30 horas) el Baloncesto Askatuak, el actual colista de la LEB Adecco Plata. Sin embargo, la noticia de ayer era que ya se había confirmado el fichaje del croata Dino Erceg, ala-pívot de 2.03.

El jugador balcánico llegó en la mañana de ayer a Marín y solo tuvo tiempo para instalarse en su nuevo domicilio, ya que no realizó la sesión de entrenamiento de la tarde-noche de ayer. Hoy estará en la lista de convocados, pero no es seguro que el técnico le pueda conceder minutos. El ala pívot croata estaba jugando en la liga de Kosovo, en concreto en el Bashkimi, tiene 28 años y ya estuvo en las ligas griegas, francesa, rumana y croata.

Regresando a la trascendencia del choque el equipo de Javier Llorente no puede fallar. Es evidente que todo lo que no se ganar será ante todo un mazado sicológico porque la presión sobre la plaza de descenso se incrementaría. En cambio,un triunfo de los marinenses significaría la séptima victoria dejando a los vascos con dos triunfos, una ventaja que se podrá manejar de manera tarnquila en la recta final de liga.

Pero ya no es cuestión de que los marinenses no quieran fallar ante el colista. Es cuestión de reivindicarse ante su afición que seguro esperará un trabajo sobresaliente del equipo sobre la pista y como premio un triunfo que aleje cualquier tipo de fantasma sobre un posible crisis de juego.

Javier Llorente, entrenador del bloque marinense, lo tiene claro ya desde que comenzó a entrenar esta semana: «Hay que espabilar sí o sí porque creo que no estamos en condiciones de poder ceder otra derrota».

El bloque vasco como ya indicamos el pasado miércoles llega a Marín con tres incorporaciones que seguro le van a dar otro aire al que marcado durante la primera vuelta: el base lituano Robertas Bitinas, el americano Devin Grimes y Malic Fall.

En el bando marinense conviene recordar que no estará ya Al Rapier y Javier Llorente tendrá que exprimrir al máximo el juego interior, con Joseba Aramburu y Lucho Fernández, que deberán contar con la ayuda de Gregorio Adón, Cedric Belemene y Alberto Homs. También estarán los restantes componentes del equipo.

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