El PCF gana otro órdago

El club logra convencer a Álvaro Bustos para que renueve una temporada más y cumpla su tercera campaña jugando de granate
 
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photo_camera Álvaro Bustos celebra un gol durante la pasada temporada. DAVID FREIRE

El culebrón del verano toca a su fin. Y lo hace, en principio, con final feliz para el Pontevedra. Y es que el club granate ha alcanzado un principio de acuerdo para renovar a Álvaro Bustos una temporada más, como ha podido confirmar este periódico y como también apuntan varias fuentes, como los periodistas Ángel García y Víctor Abajas, especializados en el mercado.

De este modo, salvo cambios de última hora -el posible aplazamiento de la Segunda B podría dar un vuelco a todo-, Álvaro Bustos firmará de nuevo con el PCF y se unirá a un proyecto ambicioso, una de las claves para terminar de convencerse para continuar en la Boa Vila.

Y es que a lo largo de todo el verano, el Pontevedra ha hecho constantes llamadas al teléfono de Bustos para tratar de que el gijonés apostase por continuar jugando a la ribera del Lérez y rechazase los cantos de sirena que le han llegado tanto del extranjero como de la Segunda División B. Y es que si primero se habló de ofertas importantes del Recreativo de Huelva y el Racing de Ferrol, en los últimos días varias fuentes han apuntado el interés serio del Extremadura y el Racing de Santander, recién descendidos de Segunda, por hacerse con sus servicios.

Recre, Racing de Ferrol, Extremadura o Racing de Santander se han interesado por el extremo asturiano este verano

A pesar de lo apetecibles que resultaban las propuestas, finalmente Bustos ha valorado la estabilidad que le proporciona el Pontevedra, ya que conoce el club, la ciudad y es valorado por una afición que le ha arropado mucho en el año y medio que acumula vistiendo de granate.

Así, aunque no hay nada firmado, todo hace indicar que el PCF se apuntará otro órdago a su favor, después de haber hecho un esfuerzo por las prestaciones económicas ofrecidas al futbolista criado en la cantera del Sporting de Gijón. Y es que en los últimos tiempos, el club pontevedrés ha sido capaz de llevarse el gato al agua a la hora de fichar a jugadores muy cotizados en el mercado, como son los casos de Rufo, Imanol García o, por supuesto, Charles Dias.

De este modo, una vez se haga oficial la renovación, el Pontevedra contará para sus bandas con cuatro extremos mayores de 23 años: Bustos, Álex González, Oier Calvillo y Óscar Fernández. La posición de atacante de banda es una de las que más importancia tiene dentro de la planificación del club, ya que la intención del PCF es confeccionar un equipo con capacidad para hacer daño desde la velocidad. Una velocidad que no tiene con Charles y Rufo, delanteros con otras características.

En los últimos tiempos, el Pontevedra ha sido capaz de fichar a jugadores muy cotizados como Rufo, Imanol García o Charles

SIN FICHAS. Además, una vez Bustos estampe su firma en el contrato con el Pontevedra, el club completaría las 16 fichas de jugadores mayores de 23 años que se permiten en Segunda B por temporada. Esta circunstancia obligará al PCF a deshacerse de Naveira, futbolista que de cara a la próxima temporada dejará de ser sub-23.

El objetivo de dejar una ficha libre tiene como fin la incorporación de un central de garantías para acompañar a Víctor Vázquez y dejar al veterano Pol Bueso con el rol de teórico suplente de ambos. El club sigue tanteando el mercado consciente de la importancia de elegir bien.

Día clave para el futuro de la Segunda B: la RFEF propondrá posponerla
El lunes es un día clave para el futuro de la Segunda División B y demás categorías no profesionales gestionadas por la Real Federación Española de Fútbol. Y es que el presidente del ente federativo, Luis Rubiales, se reúne con sus homólogos territoriales para analizar la situación del balompié nacional y posponer el inicio de las competiciones al menos hasta finales del año 2020 debido a la evolución de la pandemia.

En el caso de que los presidentes acuerden un aplazamiento de la Segunda B, como así parece que sucederá, la decisión deberá pasar por la Asamblea. Esto podría desembocar en un rechazo, ya que muchos clubes no ven viable acumular al menos nueve meses de inactividad, mientras que la mayoría de futbolistas rechazan más parones.

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