Pedro Vázquez lleva su nombre tatuado en el tobillo, en chino. Fue un pecado de adolescencia, "una trastada, una locura", comenta entre risas recordando sus tiernos 15 años. En la muñeca, ya más maduro, se grabó un pequeño homenaje a su hermano, un pentagrama cargado de notas biográficas, "una canción que él me dedicó".
El hermano de Pedro, Yago, se gana la vida en Brooklyn, en Nueva York. Es pianista de jazz, uno de los mejores de Galicia. Los Vázquez, una familia de virtuosos, cada uno en su faceta.
La música de Yago pone ritmo al juego de Pedro, que todavía tiene por delante un período de aclimatación a la temporada, después de superar una apendicitis que lo ha mantenido en el dique seco durante un mes. El extremo se hallaba en Nueva York, a principios de julio, precisamente con su hermano. A punto de regresar a Galicia para reincorporarse al Pontevedra, algo comenzó a fallar en su organismo.
"Pensé que algo me había sentado mal, que había cogido frío. Cuando conocí el diagnóstico, me quedé sorprendido". Aunque suene a cosa de niños, la apendicitis no es una enfermedad a la que los adultos sean inmunes. Lo operaron en Estados Unidos, lo que retrasó su regreso a casa y, sobre todo, condicionó su retorno a los terrenos de juego.
"Mis compañeros llevan entrenando un mes y pico. A mí todavía me falta eso", explica el extremo de la escuadra granate, deseoso de volver a estar al cien por ciento.
Ha comenzado un curso que afronta con cierta ansia de revancha con el pasado. "Nos quedó una espinita clavada, sobre todo por los partidos como visitantes. Debemos solventar nuestro problema con el césped sintético y seguir fuertes como locales. Debemos seguir madurando", reconoce el atacante de la escuadra granate. El Pontevedra trabaja para mejorar como visitante. Será el tiempo el que diga si lo ha conseguido.
"Este año comprobaremos si hemos encontrado la receta. Pero lo de la temporada pasada es curioso. El cambio entre lo que hacíamos en Pasarón y a domicilio era demasiado".
Aún hoy, los protagonistas desconocen las causas de lo que sucedió en las visitas granates. El cuadro de Pasarón pretende cambiar esa faceta de su vida, aunque ello no implique una modificación del estilo de juego.
"En la primera vuelta de la temporada pasada jugábamos más o menos como ahora. Mucho cambio no debería haber".
MELILLA. El grupo se prevé igualado con muchos rivales exigentes y uno que le atrae especialmente al jugador vigués: Melilla. "Es una ciudad difícil para vivir, pero allí me trataron muy bien. Tengo muchas ganas de volver".
La Liga será exigente, como siempre, aunque, también como siempre, es pronto para saber quien luchará por los puestos de play-off.
Pedro realiza su apuesta. "El Rayo Majadahonda se ha reforzado bien y tiene que estar peleando por los puestos de arriba sí o sí. El Ibiza maneja un gran presupuesto. Melilla y Baleares parecen equipos muy rocosos en su casa y siempre van a estar en la parte alta. Nosotros también vamos a estar ahí. Pero si me dan un equipo a elegir, quizás sea el Atlético B. El año pasado me pareció de lo mejor de la categoría. Incluso en el play-off me sorprendió un poco que no llegase más lejos".
