PONTEVEDRA. El Pontevedra realizó ayer la última sesión de entrenamiento de la semana, tras la cual Manu Fernández decidió convocar a todos sus hombres disponibles para el partido de mañana contra el Dorneda. La lista la componen 17 futbolistas (uno será descartado antes del choque), entre los que está Candela, que es la principal duda del técnico por problemas físicos.
El centrocampista se reincorporó al trabajo con el grupo y quiere participar en el partido, pero sigue con bastantes molestias musculares y el preparador granate no tiene claro si es conveniente hacerle jugar. «Sería forzar, pero tenemos una urgencia con este partido», comentó Manu Fernández.
A las bajas de los lesionados Fran Fandiño, Tubo y Benja y del sancionado Pablo González se sumó ayer la duda de Caco, que arrastra molestias, pero que finalmente ha entrado en la convocatoria.
El lateral es uno de los futbolistas que está acusando los entrenamientos sobre superficie artificial que está realizando el Pontevedra. Esta semana el equipo granate ha llevado a cabo cuatro sesiones en el campo de A Xunqueira, con las consecuencias físicas que esto conlleva, por el estado del césped de Pasarón. Además, las previsiones de lluvia para este fin de semana no son la mejor noticia para la recuperación del campo, que todo indica que no estará en las mejores condiciones y, por lo tanto, perjudicará al equipo que pretende apostar por el juego raso que, a priori, sería el Pontevedra.
Javi Otero
Los problemas en la enfermería continúan, pero no todo es negativo en cuanto al estado físico de la plantilla, ya que Tubo ha empezado a trabajar con el grupo y Javi Otero parece totalmente recuperado de sus problemas musculares.
Este último disputó la segunda parte del partido contra el Somozas y apenas sintió molestias. «Era el primer partido que jugaba después de la última lesión que tuve. Las molestias del pubis cada día son menores y de las dos roturas de fibras que tuve ya no tengo ningún tipo de dolencia», señaló, aunque confesó que «físicamente no estoy a mi mejor nivel», ya que le faltan entrenamientos, «pero día a día me voy encontrando mejor».
Javi Otero destacó que, «después de los dos últimos partidos el equipo necesita ganar» y analizó la derrota contra el Somozas (2-1). «Yo creo que, en líneas generales, no fue un partido bueno. Creo que no nos merecimos la victoria, aunque fallamos algún gol que otro. Para mí, el resultado justo habría sido el empate. El equipo está capacitado para rendir mejor y creo que lo vamos a demostrar».
En este sentido, el extremo apunta que el Pontevedra no debe fijarse tanto en el rival, sino en sí mismo. «Si hacemos lo que sabemos hacer, no debería haber problemas, no porque sea el Dorneda, sino contra cualquier equipo».
Javi Otero cree que el cuadro coruñés, «a Pasarón, supongo que por las dimensiones y las características, vendrá a cerrarse, aunque no lo he visto jugar, pero arriba tenemos calidad suficiente para poder ganar el partido aunque ellos decidan estar atrás».
Dapo, principal duda en el Dorneda
El Dorneda llega al partido contra el Pontevedra sin futbolistas sancionados ni lesionados, pero con una plaga de gripe en su plantilla que ha afectado a varios futbolistas que, según señala su técnico, parece que podrán jugar.
El que peor se encuentra es Dapo, uno de los pilares del equipo. El centrocampista es el único hombre del Dorneda que ha participado en todos los partidos, tanto de central como de mediocentro.
«Nos aporta fuerza, físico, músculo, agresividad, juego aéreo... y si no lo tenemos, será un hándicap», señaló Carlos Brizzola, entrenador del Dorneda, que ve el encuentro de mañana como «una prueba importante y dura».
