El Pontevedra comenzó los diálogos con Luismi para tratar la renovación de su contrato de cara a la próxima temporada. El club granate y el entrenador llevan con notable discreción las negociaciones para ampliar la relación que los une. El técnico sigue siendo la primera opción del club de cara al próximo ejercicio. La intención de ampliar los vínculos con el preparador vigués se mantiene dentro de la política de Lupe Murillo de los últimos tiempos: la máxima mandataria siempre ha optado por dar continuidad en el banquillo a los preparadores que han concluido el anterior ejercicio.
Los datos de las últimas campañas así lo ponen de manifiesto. Desde que ha llegado a la dirección, Murillo solo ha tenido a tres preparadores de la primera plantilla. Con la que acaba de concluir ya van cinco temporadas de la máxima dirigente al frente de la entidad. Manu Fernández, Luisito y ahora Luismi. La apuesta por la continuidad se fundamenta, además de en una cuestión de política de club, sobre la idea de la consecución de objetivos. En el caso de Luismi, la permanencia en Segunda B la pasada campaña y el buen rendimiento colectivo del equipo, que ha peleado hasta el final por colarse en los cuatro primeros puestos en la actual temporada, son su aval para disponer de la confianza del consejo de administración.
La gran ovación ofrecida por la afición a la plantilla en el último partido de la temporada en Pasarón, contra el Atlético de Madrid B, a pesar de la derrota sufrida por el equipo y de su eliminación de la carrera por la promoción, puso de manifiesto el reconocimiento de los seguidores al colectivo que dirigió el vigués durante el presente curso.
Solo dos destituciones: la de Manu Fernández después de la primeras diez jornadas del curso 2014-15, el primero de Murillo al frente del barco, y el de Luisito después de que el teense batiese el récord de partidos de liga consecutivos al frente del Pontevedra en toda su historia, son las excepciones a la confianza que ha depositado la dirigente en los inquilinos del banquillo del equipo profesional.
Ello no es garantía de que Luismi vaya a continuar dirigiendo al once granate de cara al próximo curso, ya que deben negociarse diferentes aspectos, como cantidades económicas, proyecto deportivo, etc. Además de la continuidad del entrenador, el club también deberá tratar la continuidad del cuerpo técnico, con Jesús Ramos, segundo entrenador, y Miguel Arcos, preparador físico.
La entidad trabaja sin marcarse plazos, pero con la mayor diligencia posible para poder zanjar cuanto antes un asunto que considera principal.
Si bien Luismi es la primera opción para la entidad de Pasarón, el club dispone de una gran cantidad de variables en el mercado. Y es que el fútbol gallego y español puede presumir de disponer de una gran cantidad de entrenadores de diferentes perfiles.
De momento, la entidad todavía no ha comenzado la ronda de negociaciones con los jugadores del primer equipo de cara al próximo ejercicio.
Este martes estaba previsto que se llevase a cabo un entrenamiento de la primera plantilla en el campo de Chan do Monte de Cerponzóns, pero finalmente la sesión se suspendió.
Los futbolistas están citados para el jueves en Pasarón, a las 10.30 horas, en el que podría ser el último ensayo de la actual temporada 2018-19.
La entidad de Pasarón deberá empezar a componer el puzzle del próximo ejercicio partiendo de la base de los seis futbolistas que tienen contrato para el próximo ejercicio: cuatro habían firmado un compromiso por más de un ejercicio: Edu, Javi Pazos, Pedro Vázquez y Romay. Un quinto, David Castro, cumplió los objetivos planteados por la entidad para seguir defendiendo sus colores y un sexto, Mouriño, regresará de su cesión con el Rápido de Bouzas tras pactar una ampliación de los vínculos con la entidad granate.
Está previsto que los contactos empiecen esta semana.
