1-2. El Pontevedra logra un triunfo vital en Valladolid

Los granates derrotaron al filial pucelano con goles de Mouriño y Eder y dan un paso muy importante en su lucha por la permanencia

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photo_camera Darío Flores intentar taponar a un jugador del Valladolid B

El Pontevedra sumó tres puntos vitales a orillas del Pisuerga. El equipo granate, que sufrió en los últimos minutos para atar el triunfo, se impuso al filial del Valladolid gracias a los goles de Mouriño y Eder. Mayoral, tras un discutido penalti, recortó distancias a falta de media hora para el final. El derroche defensivo del conjunto lerezano permitió sellar la segunda victoria consecutiva a domicilio en Liga -ambas sobre superficie artificial- y superar el sabor agrio del último empate en Pasarón. Después de dejar atrás en la clasificación a un rival directo que llevaba doce jornadas sin perder, el cuadro pontevedrés alcanza los 41 puntos a falta de tres finales. Afrontará la siguiente, en Segovia, sin un Álex González expulsado en el minuto 89.

Los primeros compases siguieron el guion previsto: peleas constantes, muchas disputas en la medular y poco fútbol. El césped sintético y las dimensiones reducidas del terreno de juego dificultaron el plan del Pontevedra, muy incómodo en el arranque. Becerra, de hecho, pudo marcar en el minuto tres al cabecear a las manos de Edu un peligroso centro de Samanes. Al equipo de Luismi Areda, carente de profundidad, le duraba demasiado poco la pelota. Becerra estrelló el balón en la barrera desde la frontal antes de que Edu apareciese de forma mágica para evitar el gol de Antonio Domínguez. La acción fue invalidada por fuera de juego, pero sirvió como aviso a un dormido -quién sabe si por tan temprano horario- cuadro granate. 

El conjunto pontevedrés apostó por jugar en largo para sacudirse la feroz presión del filial. Varios envíos de los centrales hacia Eder provocaron las primeras llegadas al área rival, aunque sin demasiado peligro. La formación visitante mejoró con el paso de los minutos. Con Kevin Presa en ayuda de la maltrecha zaga, la libertad de Marcos Álvarez y Álex González desde los costados impulsó a la escuadra lerezana en ataque. 

Darío Flores se tuvo que retirar del terreno de juego en el minuto 22 por una lesión muscular

El primer contratiempo serio llegó en el minuto 22: Darío Flores, tras recibir un fuerte golpe, tuvo que ser sustituido. Nacho López, desaparecido de los planes del técnico en las últimas semanas, ocupó el lugar del zaguero uruguayo. 

El duelo se convirtió en un auténtico correcalles en los últimos minutos del primer tiempo. Becerra, omnipresente, volvió a exigir una respuesta felina de Edu para evitar el primer gol del Valladolid B. La ocasión nació de un mal envío de Mouriño, protagonista a la postre, en el centro del campo. Cada pérdida de balón era sinónimo de una ocasión clara para el conjunto blanquivioleta, muy a gusto al contragolpe. El intercambio de golpes, eso sí, favoreció a un Pontevedra venido a más con el avance del encuentro. El equipo visitante se adelantó en el minuto 41: Mouriño, en un lanzamiento de falta directa, superó a Dennis con un golpeo de fantasía. La acción parecía propicia para colgar el esférico al área, pero el mediapunta porriñés apostó por buscar la portería. Y le salió a la perfección, para delirio del cerca de un centenar de aficionados del conjunto granate que se dieron cita en los Anexos José Zorrilla.

Miguel Rivera varió su esquema tras el descanso. Dio entrada al colombiano Luis Suárez, su máximo goleador, y la escuadra vallisoletana se marchó decidida a por el empate. Avisó en varias ocasiones, pero la efectividad correspondió de nuevo al equipo lerezano: Eder, siempre batallador, se anticipó a su par para rematar en el área pequeña un preciso centro de Añón en el minuto 56. Con el cuadro anfitrión en busca de la igualada, los pupilos de Luismi Areda supieron aprovechar su enésimo contraataque para poner tierra de por medio. Por desgracia, la alegría duró poco. Muy poco.

El colegiado señaló un penalti discutible de Edu sobre Luis Suárez y expulsó a Álex González por doble amonestación en el tramo final del encuentro

La formación castellana no cedió en su empeño pese al 0-2. Luis Suárez, en una jugada aislada, aprovechó un gran pase interior para plantarse solo ante Edu. El arquero quiso tapar su disparo, pero derribó al delantero y el colegiado no dudó en señalar el punto de penalti pese a las protestas del capitán. Mayoral, con temple, transformó el lanzamiento desde los once metros para apretar al máximo el tramo final.

La presencia de un Edu sensacional bajo los palos ayudó a atar los importantes tres puntos. Mayoral, Samanes y Antonio Domínguez, con varios tiros lejanos, hicieron peligrar la victoria. El gran trabajo colectivo, finalmente, acabó por sellar un triunfo vital en el camino hacia la permanencia pese a la expulsión de Álex González por doble tarjeta amarilla a escasos segundos del pitido final.
 

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