Los Hispanos Juveniles se quedaron fuera de las medallas. Pero se repusieron al golpe, mejoraron lo visto en la segunda fase de grupos y completaron dos buenos partidos, primero frente a Francia y después contra Alemania, para acabar alcanzando la quinta posición del Campeonato de Europa sub-18. Contra la selección germana, el equipo dirigido por Alberto Suárez se impuso tras un continuo intercambio de golpes que sostuvo una igualdad extrema en el marcador durante casi todo el partido. Al final, España ganó por un estrecho margen de dos tantos y ya puede regresar a casa con buen sabor de boca después de un buen final de campeonato.
Lo cierto es que vencer no fue, ni mucho menos, sencillo. La España sub-18 del pontevedrés Álvaro Preciado, que marcó dos goles, se topó con un conjunto alemán bien armado y capaz de reponerse a cada una de sus embestidas. Los golpes de cada uno de los dos conjunto encontraban réplica inmediata y al descanso, de hecho, el resultado era de 15-15, por lo que todo estaba absolutamente abierto para una segunda mitad que iba a decidir al quinto clasificado del campeonato.
España no se vino abajo y mantuvo su nivel, mientras que Alemania tampoco quiso vender barata su piel. El caso es que la lucha fue encarnizada, pero Alberto Suárez y sus chicos lo quisieron un poco más y, de hecho, consiguieron ir ganando hasta de seis tantos de diferencia (27-21). Y acabaron consiguiendo lo que querían. Fueron, al final, tan solo dos goles de diferencia los que permitieron al conjunto español hacerse con el logro que buscaban.
De este modo, España acabó justo por debajo de los cuatro mejores del Campeonato de Europa. Después de quedar en la segunda posición de la primera fase de grupos y en el último de la segunda, los Hispanos Juveniles se impusieron con solvencia a Francia (20-23) para, finalmente, acabar este domingo con la citada selección alemana en un buen partido.
