PONTEVEDRA. Saleta Castro comenzó ayer con buen pie la carrera hacia un sueño, clasificarse para la prueba de su vida, el legendario Ironman de Hawaii.
La triatleta pontevedresa terminó quinta en el Ironman de Wiconsin, en la primera prueba puntuable para Kona 2014 en la que compite, que acabó ganando la americana Jackie Arendt.
En una prueba dominada por las triatletas americanas, Saleta Castro fue la primera europea en cruzar la meta y acabó en una meritoria quinta plaza, que le proporciona sus primero puntos para el ranking clasificatorio del IM de Hawaii.
Saleta Castro llegó a Wiconsin como una de las favoritas para luchar por el podio y no defraudó desde los primeros metros de la prueba. Como es habitual, la triatleta pontevedresa fue de las mejores en el agua y salió en quinta posición a tan solo cuatro minutos de Hillary Bicay, primera. Saleta Castro completó en una hora los 3,8 kilómetros de la natación y comenzó el ciclismo con las opciones intactas de subirse a lo más alto del podio.
Durante gran parte del sector la ciclista Saleta Castro fue en quinta posición. Tras más de cinco horas sobre la bici, en la que la pontevedresa llegó a colocarse cuarta, llegó a la T-2 en sexta posición. El top-5, hasta ese momento, estaba compuesto por cinco americanas que aprovecharon a la perfección el conocimiento que tenían del circuito de Wisconsin.
Así, Saleta comenzó la maratón a menos de 5 minutos del podio, después de recorrer los 180 kilómetros de ciclismo en 5 horas y 35 min, es decir, tras rodar a una media de más de 32 km/h.
La triatleta pontevedresa, conocedora de sus posibilidades comenzó la carrera con un buen ritmo pero si cebarse demasiado, 42 kilómetros se pueden hacer muy largos. Fruto de este comienzo de la maratón, Saleta Castro pronto cazó a las dos triatletas que llevaba delante para ponerse cuarta en el kilómetro seis. A partir de ahí comenzó una dura lucha consigo mismo, ya que tenía que intentar mantener el ritmo sin entrar en la lucha por asaltar el podio, ya que la tercera estaba a más de cinco minutos y si intentaba pillarlas podría desfondarse.
Acertadamente, la triatleta pontevedresa, que persigue el sueño de estar en la salida del Ironman de Hawaii 2014, optó por seguir al mismo ritmo para mantener la cuarta plaza, que era un excelente resultado, y esperar al posible desfallecimiento de alguna de las tres primeras clasificadas.
Finalmente no puedo ser así, y a pesar de que la pontevedresa mantuvo un muy buen ritmo de carrera, la americana Beth Walsh, que llegando desde atrás a un ritmo diabólico pudo con Saleta Castro y le acabó arrebatando en los últimos kilómetros la cuarta plaza.
