1-2. La segunda unidad da la victoria al Pontevedra ante el Langreo en la Copa RFEF

Rivera y Pibe lograron los goles del equipo granate en el partido de vuelta de la primera ronda del torneo, en el que defiende título

Javi López disparando a portería durante el partido de la Copa RFEF contra el Langreo, disputado sobre un campo encharcado en muchas zonas. RAFA FARIÑA
photo_camera Javi López disparando a portería durante el partido de la Copa RFEF contra el Langreo, disputado en Pasarón. RAFA FARIÑA
Ficha técnica
1- Langreo: Adrián Torre; Cristian (Javi Sánchez, min. 65), Otia, Zubiri (Dani Abalo, min. 75), Cabranes; Samba (Riki, min. 75), Nacho Calvillo; Pablo Acebal, Aimar, Omar; y Sergio Ríos.
2- Pontevedra: Rubén; Juan, Campillo (Adrián León, min. 46), David Castro, Nacho Lorenzo; Jesús; Javi López (Josiño, min. 79), Mouriño, Pedro Vázquez (Antón, min. 64), Pibe; y Rivera.
Árbitro: López Abelleira (Comité asturiano). Amonestó con tarjeta amarilla al jugador local Omar y al visitante Jesús.
Goles: 0-1 Rivera (min. 34). 1-1 Omar (min. 58). 1-2 Pibe (min. 62).
Incidencias: Nuevo Ganzábal. 410 espectadores.

El vigente campeón de la Copa Federación ya está en octavos. Rivera y Pibe, grandes protagonistas, certificaron la trabajada victoria del Pontevedra en Langreo. El equipo granate tiró de fondo de armario para vencer a un adversario de igual categoría. Más allá del pase, la confirmación de que la cantera está preparada para ayudar supuso la mejor noticia de la noche. El próximo jueves, a partir de las 16:00 horas, el conjunto lerezano conocerá a su rival en la siguiente ronda.

Como era previsible, Luismi Areda recurrió a la rotación masiva en el Nuevo Ganzábal. Solo dos futbolistas -Campillo y Javi López- repitieron, respecto al último partido ante el Rápido, presencia en el once titular.

Pese a los numerosos cambios, el Pontevedra se hizo con la batuta del encuentro desde el inicio. El conjunto visitante, dentro del bajo ritmo general, fue quien más arriesgó en busca del gol: tuvo la pelota, inquietó por la banda izquierda y gozó de oportunidades claras para marcar. La escasa intensidad del rival, que también aprovechó para regular descansos, facilitó la tarea.

Nacho Lorenzo estuvo especialmente activo, y de su conexión con Pibe nacieron varias jugadas peligrosas. Un par de disparos lejanos del lateral zurdo, primero, hicieron trabajar a Adrián Torre. Acertó el portero poco después, al detener un remate de Mouriño a bocajarro. Una gran acción colectiva acabó en las botas del mediocentro porriñés, que se topó con una magnífica respuesta del meta.

Luismi presentó una alineación con muchos jugadores jóvenes que respondieron a su exigencia

El 0-1, premio al dominio, llegó en el minuto 34. Rivera, bien desmarcado, recibió un pase al espacio y observó la posición adelantada de Adrián Torre. El joven ariete trazó una vaselina perfecta y superó al arquero con holgura.

El Langreo dio respuesta con un par de tiros de Sergio Ríos y otro de Cabranes, pero sin llegar a perturbar la tranquilidad de Rubén.

La segunda mitad, en cambio, sí fue más igualada. El cuadro local pisó el acelerador tras el descanso y consiguió el empate en el minuto 58. Sergio Ríos, hábil en el robo, recuperó una pelota en la medular que cedió a Nacho Calvillo. Omar recibió un pase entre líneas de su compañero y, solo en el mano a mano, definió bien ante la salida del guardameta.

Mouriño pudo marcar el tercer tanto del equipocon un disparo al larguero

El tanto espoleó a la escuadra granate. Los pupilos de Luismi Areda, veloces al contragolpe, desequilibraron la balanza solo cuatro minutos después. Un ajustado golpeo de Pibe, tras jugada personal, puso tierra de por medio en la eliminatoria.

El choque pudo tomar rumbos distintos en el tramo final. El Pontevedra, con la clasificación en el bolsillo, estuvo a punto de sentenciar con un chut de Mouriño que se estrelló en el larguero. Su disparo, envenenado, tocó en un defensa antes de dirigirse hacia la portería. La entrada del vilagarciano Dani Abalo, ex del Celta, reactivó al conjunto asturiano en la parcela ofensiva. Riki dispuso de una clara ocasión para igualar el marcador, pero Rubén detuvo su remate. Finalmente, las interrupciones mataron un trámite con final feliz para el bloque lerezano.

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