Puede parecer complicado compaginar un trabajo de mantenimiento en el astillero de Marín con una pasión tan cara y envolvente como el automovilismo. Más todavía si estás casado y tienes dos hijas a las que dedicar tu tiempo. "Son moitas horas. Ademais, vas perder cartos sempre, incluso quedando primeiro. Pero faise porque é o deporte que nos gusta, polo aliciente competitivo, o cheiro a gasolina", reconoce Luis Torres (Salcedo, 1984), más conocido como Lucky.
Este piloto, que participará este sábado en la 23ª Subida A Escusa, empezó relativamente tarde a correr. No fue el espíritu competitivo lo que lo llevó, en 2019, a debutar en la primera Subida a Marín, sino que llegó ahí por su gusto por la mecánica. "Cando era un chaval, grazas a un veciño, puiden probar un kart, todo amateur. El preparaba coches de competición, entón eu ía para alí ao saír da escola e miraba. Sempre me gustaron a electricidade e a mecánica. Foi por aí por onde me viñeron as gañas. Con 12 anos empecei a ir con el a facerlle a asistencia a pilotos coma Roberto Torres", relata sobre sus inicios.
A diferencia de la mayoría de los 58 corredores que lo acompañarán este sábado en A Escusa, no empezó a correr hasta después de casarse. "Nese momento xa non ía de asistente, pero volveume picar o gusanillo, esta vez máis forte. Entón collín a carrozaría dun 206 e púxenme a preparala. Despois apareceu o Megane que teño agora. A carrozaría estaba por un lado e o motor por outro, pero estaban ben. Vendín o 206 e iniciei entón o soño de poder correr, que xa pensaba que non podería cumprir", explica.
Reconoce que fue fundamental el apoyo de Susana, su mujer: "Non me puxo impedimento, e aínda me animou a dar o paso". Eso sí, tanto su sueldo del astillero como el de ella no se tocan para las carreras. "É unha liña vermella que nunca quixen pasar", asegura.
Financiar esta pasión no es sencillo. A favor de Lucky juegan dos aspectos: sus conocimientos de mecánica y su don de gentes. Lo primero le permite "detectar problemas por ruídos raros" e, incluso, "arranxar o coche durante a competición". "A maior parte de veces que tiven algún problema solucioneino na propia subida. Na furgoneta levo ferramentas de todo tipo. Na asistencia quito o mono, poño a funda e son o primeiro en meterme debaixo do coche", cuenta. De este modo, ahorra muchos gastos de taller. Además, suele aprovechar piezas de desgüace o ruedas usadas.
Por otro lado, su don de gentes le ayuda a la hora de conseguir patrocinadores. "Son todas empresas de coñecidos: o bar debaixo da miña casa, a empresa de grúas ca que teño moita amizade... Iso cúbreme o 50% dos gastos. A outra metade cúbroa con traballos extra de reparación de maquinaria e medindo ben o presuposto", confiesa.
Su participación en las pruebas depende de las circunstancias. "Fago algunha proba salteada do Campionato Galego de Montaña e algunha en Asturias. Depende de como vaia a tempada. Imaxínate que un ano che toca cambiar baquet, arnés e casco. Xa é un desembolso de máis de mil euros", explica.
Aunque ha participado en el Rallye de Pontevedra de 2021, se queda con la montaña: "O motivo principal é o custo, que é menor. Tamén me gusta máis o ambiente. Moita xente di que é moi parada, pero a min gústanme eses momentos entre tramos, os nervios antes de saír, falar coa xente, facer un bocadillo de beicon...". Al fin y al cabo, se trata de su otra familia.
Vas perder cartos sempre, incluso quedando primeiro, pero faise porque é o que nos gusta, o cheiro a gasolina
El motor es su pasión, por la que hace locuras difícilmente entendibles para el resto de humanos. Es cuestión de amor.
"O obxectivo é acabar e mellorar os meus tempos"
Con la humildad que lo caracteriza, Lucky no se plantea metas excesivamente ambiciosas, aunque el año pasado terminó cuarto de su agrupación en la Subida A Escusa.
"O obxectivo é acabar e mellorar os meus tempos. Ao podio non vou chegar, hai que ser realistas. Cada vez prepáranse máis os coches. Se todos foran coma min, con motores de serie, non habería tanto espectáculo", reconoce.
"Ata agora fixen o Máster de Forcarei e a Subida á Cobertoria, en Asturias. Do circuito teño pensado facer a Subida A Escusa, a Ponte Caldelas e a Oia. A da Estrada píllame de vacacións coa familia. Hai que compaxinar todo", dice.
Con las verificaciones arranca la subida
El Campeonato Gallego de Montaña dará este sábado el pistoletazo de salida a la temporada con la Subida A Escusa (Poio). Con las aguas en calma tras el enfrentamiento entre pilotos y la Federación Galega de Automobilismo (FGA), 59 pilotos lucharán por el podio en una jornada comprimida en el sábado.
La prueba discurre por la carretera EP-9214, entre O Sartal y A Escusa. La distancia del recorrido es de 3,3 kilómetros y el desnivel entre la salida y la meta de 258 metros, una pendiente media del 14,05%.
Este viernes, a las 18.00 horas, se abre el parque cerrado, donde los corredores deberán dejar sus coches hasta el comienzo de la prueba. Estará situado en A Reiboa, Poio.
A continuación, entre las 18.00 y las 22.30 horas, los pilotos que así lo deseen podrán pasar ya las verificaciones administrativas y técnicas necesarias para la participación en la subida.
Los que no pasen las debidas revisiones este viernes estarán obligados a hacerlo el sábado, entre las 07.00 y las 09.00 horas. Tras ello, a las 09.15 horas se publicará la lista de autorizados a tomar la salida. La presentación de los pilotos en el parque cerrado se realizará a las 09.30 horas.
Una hora después, arranca la primera manga de entrenamientos. Tras la segunda, se realiza la primera carrera. Sigue la última manga de entrenamientos, que precede a la segunda y tercera carrera. Los horarios dependerán del transcurso de la prueba.
Los coches regresarán al parque cerrado, donde se realizarán, al final de la jornada, el podio y la entrega de trofeos.
De la lista oficial de inscritos, en la que figuran los nombres de los 59 participantes -20 más que la edición anterior-, destacan los de Alexis Vieitez, Jorge Pérez o Manolo Senra.
En la categoría de no carrozados, Noemí Blas, presidenta de la escudería Buxa Motor y organizadora de la Subida A Escusa, resalta a Vieitez, que ya sabe lo que es ganar la prueba en múltiples ocasiones y es uno de los mejores pilotos de montaña, y a Abrahán Vázquez. En la de carrozados, señala a los ya mencionados Jorge Pérez y Manolo Senra, dos pesos pesados.