Con el recuerdo del Multisport 2019 todavía latente en la memoria colectiva de los pontevedreses y pontevedresas, la ciudad se prepara para recibir el segundo de los tres grandes eventos que este año marcan la pauta en el calendario deportivo: el Campeonato de Europa Júnior de Luchas Olímpicas 2019.
Acostumbrada a ejercer de anfitriona en multitud de citas nacionales y gallegas y siendo regularmente, a través del Centro Galego de Tecnificación Deportiva, el lugar de concentración elegido por selecciones autonómicas e internacionales, Pontevedra tiene a partir de este domingo la oportunidad de consolidarse definitivamente en el panorama de la lucha española como un referente tanto a nivel deportivo como organizativo en una cita internacional de primer nivel.
En este sentido, cabe destacar que la ciudad acogerá un evento sin precedentes en España, pues es preciso remontarse a los primeros años de la década de los noventa para localizar en la historia deportiva de este país un campeonato de un nivel similar en lo que a la lucha se refiere.
Desde el año 1991 España no albergó ningún campeonato de lucha internacional con características similares
Si bien es cierto que en 1991 la ciudad de Barcelona albergó un Campeonato del Mundo Júnior, éste se celebró sin fase de selección previa como una prueba de experiencia de cara a los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, en los que la lucha fue uno de los deportes representados.
Es por esto por lo que el presente campeonato debe entenderse como un hito en la historia tanto de la lucha como del deporte nacional que podría servir de punto de inflexión de cara a eventos futuros.
PARTICIPACIÓN. Desde este domingo, 3 junio, y hasta el próximo domingo, día 9, alrededor de 800 luchadores y luchadoras se enfrentarán tanto por hacerse con el título europeo como por conseguir una plaza en el próximo Mundial de Estonia.
Los encargados de inaugurar los tatamis instalados para tal ocasión en el Pavillón Municipal dos Deportes serán los luchadores que compiten en lucha grecorromana, pues lo harán entre este domingo y el próximo miércoles, 5 de junio.
La lucha grecorromana inaugurará la competición, la libre femenina tomará el relevo y la libre olímpica clausurará el campeonato
Será entonces cuando la lucha libre femenina tome el relevo convirtiéndose en la protagonista del campeonato hasta el próximo viernes, 7 de junio.
Así, los encargados de clausurar una de las citas deportivas que pasarán a la historia de deporte pontevedrés y que marcará un antes y un después en el panorama nacional serán los luchadores que compiten en lucha libre olímpica quienes, al igual que sus homólogos, ofrecerán un gran espectáculo deportivo ante todos los que se acerquen al pabellón.
Así, la Selección Española participa con 30 deportistas, diez en cada una de las modalidades en competición –lucha grecorromana, lucha libre olímpica y lucha libre femenina–.
En este sentido, cabe destacar la gran presencia de Galicia en el Campeonato, pues tres de los participantes –los cuales bien han pasado, bien continúan disfrutando de una beca en el Centro Galego de Tecnificación Deportiva– tendrán la oportunidad de competir en casa ante sus familiares, amigos y compañeros.
En la categoría masculina, Carlos Yobani García (Club de Loitas Olímpicas de Vilalba) participará en -65 kg mientras que Santiago Sánchez (Club Keltoi de Vila de Cruces) lo hará en -86 kg.
Si bien el nivel de la competición es muy elevado y complica las opciones gallegas y españolas de hacerse con una medalla, ambos representantes tratarán de demostrar a jueces y asistentes su gran calidad deportiva y el gran trabajo realizado en sus respectivos clubs.
Categoría femenina
Por otro lado, en categoría femenina, Nerea Pampín Blanco (Club Keltoi de Vila de Cruces) pisará el tatami en -65 kg dispuesta a demostrar su poderío poniendo en valor a las mujeres en un deporte en el que ya representan un 35% de las fichas federativas en Galicia.
Cabe destacar que tanto Nerea como Yobani estuvieron presentes como parte del equipo español en el Campeonato Europeo celebrado en Roma el pasado año.
Así, se prevé que ese volumen de visitantes internacionales, que tendrán la oportunidad de sumergirse durante siete días en la cultura, gastronomía y tradición local, repercuta en la economía pontevedresa de una forma destacada, pues se espera que el impacto del Campeonato de Europa Júnior en la Boa Vila ronde el millón y medio de euros, una cifra en absoluto baladí.
