¿Visitante o fichaje estrella?

Puede estar solo de paso o puede que haya venido para quedarse, lo único cierto es que Pablo Coira, exlateral derecho del Celta, entre otros, entrena desde ayer con el Pontevedra CF.

El jugador comenzó su trabajo a las órdenes del segundo entrenador, Juan Iglesias, y el preparador físico, Edu Covelo, ya que Milo Abelleira se ausentó de las dos sesiones por otros compromisos, previsiblemente alguna negociación con algún refuerzo para el primer equipo.

El futbolista de Vilagarcía, campeón del Mundo sub-20 con una selección española en la que estaban, entre otros, Xavi, Casillas, Aranzubia, Orbaiz y Marchena, pidió asilo a Milo Abelleira tras dos temporadas en el fútbol húngaro. Por ahora, solo entrenará con los granates y, aunque tampoco lo descarta, todavía no se plantea quedarse.

''Estaba mirando otras opciones de equipos de fuera y no salió nada, se está retrasando todo. Entonces hablé con Milo para tener la opción de entrenar aquí con ellos y estoy muy agradecido de que haya accedido'', señaló el futbolista.

Curiosamente, el Pontevedra busca un centrocampista para reforzar la primera plantilla, una posición en la que Coira se ha reubicado en las últimas temporadas, ofreciendo un buen rendimiento. ''De momento no he contemplado la opción del Pontevedra porque no he hablado con Milo, que no ha entrenado hoy (por ayer), pero no se descarta nada. En un principio hablamos solo de entrenar''.

El lateral reconvertido en centrocampista es consciente de las dificultades que tendrá a la hora de encontrar equipo, ya que considera que el mercado ''está bastante parado. He estado hablando con algunos equipos, pero de momento está complicado''.

De su experiencia en el fútbol húngaro, donde militó en el equipo que vio nacer a Puskas, el Honved de Budapest, se queda con lo positivo, especialmente con ese cambio de posición en el campo que tan bien le ha salido.

''Estuvo bien en cuanto a juego, porque pude participar en un buen número de partidos, y también porque pude actuar en una posición nueva para mí, el mediocentro. Siempre estuve muy encasillado en el lateral derecho y ahora creo que puedo rendir bien en esa posición'', comentó Pablo. En este sentido, también señala que la experiencia estuvo ''bien hasta que dejaron de pagar, como en todos lados. Fue un poco la nota negativa''.

A prueba

No solo Pablo Coira fue la novedad en el entrenamiento de ayer, sino que hubo otras dos caras nuevas en el campo de A Xunqueira. La situación de estos dos jugadores es, al menos, más clara, ya que vienen a probar suerte y a convencer a Milo para quedarse.

Se trata de Pablo Piñeiro, interior procedente del Negreira, y de Julián, mediapunta del Santa Comba. El primero, de 25 años, militó también en el Portonovo, mientras que el segundo, de la misma edad, fue el máximo goleador del equipo coruñés el pasado curso con siete tantos.

Comentarios