El fútbol fue cruel con el Pontevedra. Porque el conjunto pontevedrés perdió sobre el final un punto que ya saboreaba. La resistencia granate duró 87 minutos. El encuentro era igualado hasta entonces. De hecho, incluso el Pontevedra tuvo sus opciones para adelantarse. Pero no las aprovechó y tras un mano a mano que Bastos tiró fuera, Samu Corral golpeó de verdad. La inocencia lerezana contra las uñas del líder. Segunda derrota consecutiva. Esta contra un equipo de la zona alta, pero muy dolorosa por el cómo.
Y es que el Pontevedra necesitaba sumar. Los dos últimos resultados del equipo hicieron que Antonio Fernández agitase el avispero. El técnico pontevedrés entendió que ante un Linares colíder, aunque no excesivamente cómodo llevando el peso del partido, debía guardar la ropa. Porque el equipo jienense es prácticamente imbatible, sobre todo, cuando empieza mandando. Así que Fernández apostó por una fórmula inédita en el Pontevedra desde hace años: tres centrales. Era el turno para el debut de Luis Martínez, flanqueado en el eje de la zaga por Soto y Churre. Por delante, para reforzar todavía más el carril central, a los inamovibles Yelko Pino y Miguel Román se le sumó un Mario Ortiz que también se estrenaba como titular.
El plan del PCF se centraba más en el contragolpe que en el ataque posicional. Y lo demostró desde el inicio. La idea granate -de blanco en Linarejos- era recuperar y correr. Aunque para eso debía salir bien de la presión tras pérdida del Linares. Cuando lo logró y dio tiempo a sus carrileros a salir, encontró el peligro. Tanto que en el segundo minuto de partido produjo la mejor ocasión de todo el primer acto para los de fuera. Abelenda recibió de espaldas, la dejó de cara para Yelko y el '10' abrió a la izquierda para la incorporación de Álex González. El capitán controló y, sin pensarlo, golpeó. Su chut, desde fuera del área, rozó el travesaño de Ernestas, que nada hubiese podido hacer pese a su 'vuelo'.
La oportunidad reforzó a los visitantes, que pretendían presionar alto pero pronto rebajaron algunos metros sus líneas para evitar exponerse demasiado. El Linares iniciaba bien el juego y encontraba huecos por dentro. Y en una de esas acciones, Hugo Díaz se plantó en carrera en el área y definió cruzado a gol. Cortés sacó una mano abajo prodigiosa para evitar el primero.
El susto provocó que el Pontevedra pasase a cerrar con cuatro en el mediocampo, con Brais tirado a banda en vez de en punta. El movimiento terminó de encorsetar el choque. El PCF controlaba relativamente la situación. E incluso dañar a la contra. Una nueva incursión de Álex González a la carrera acabó con un centro raso al segundo palo que Bastos, algo molestado por Yelko, no conectó bien en propicia situación. Su chut, blando y a las manos, era una metáfora del mal de un equipo que no termina de hacer daño en sus llegadas.
Pero al menos el conjunto de Pasarón no sufría. Al descanso, Fernández rompió la defensa de tres y dio entrada a Rubio para formar en 4-1-4-1. Menos protegido en el área pero con más volumen de jugadores en las líneas posteriores, el PCF tan solo pudo ir capeando a un Linares que empezaba a inquietar con más asiduidad. Dos malos controles de Hugo Díaz le negaron la posibilidad de volver a probar a Cortés. Entremedias, un balón diagonal del central Caro al diabólico Fermín no fue colocado entre palos por el futbolista cedido por el Barça.
Del 0-1, al 1-0
Los cambios daban oxígeno al conjunto foráneo mientras su rival no terminaba de encontrar la fluidez con sus modificaciones. El tiempo iba cayendo y el Pontevedra ya se relamía. Tanto que en una circulación pausada, Soto encontró con un gran balón filtrado a Bastos en la frontal del área. El lateral firmó un control orientado de un nivel superlativo para girarse y plantarse ante Ernestas algo escorado. Pero definió con el interior del pie y el efecto del balón, en vez de acercarse al palo, lo fue alejando.
El PCF había perdido la oportunidad de ganar. Pero más iba a perder en la acción inmediatamente posterior. Porque en un ataque por la izquierda del Linares con el equipo pontevedrés plantado en el área, Samu Corral se anticipó en el primer palo a Masogo para cabecear a gol un gran centro lateral. La pegada. El balompié era cruel con el Pontevedra y le dejaba sin un punto tan merecido como superlativo en el bastión de Linarejos, donde el Linares llevaba nueve encuentros consecutivos marcando y no pierde desde hace prácticamente un año.
Pontevedra: Cortés; Bastos, Soto, Luis Martínez (Alberto Rubio, min. 46), Churre, Álex González; Yelko Pino, Miguel Román (Masogo, min. 78), Mario Ortiz (Guèye, min. 63); Abelenda (Bakero, min. 89) y Charles (Rufo, min. 63).
Goles: 1-0, min. 87: Samu Corral.
Árbitro: Díaz Escudero (Murcia). Amonestó con amarilla a Gelardo y Samu Corral por el Linares y a Churre, Yelko Pino, Cortés, Guèye y Masogo, por el Pontevedra.
Incidencias: Partido correspondiente a la séptima jornada del Grupo 1 de Primera Federación. Linarejos.