El Consejo Superior de Deportes allanará el camino para finalizar la Segunda B y la Tercera División, que ahora mismo se encuentran en una encrucijada con una única vía: la suspensión temporal de las competiciones o una cancelación definitiva. Esta solución no gusta a ninguno de los grandes dirigentes del fútbol, por lo que en los próximos días es previsible la publicación de un Real Decreto por parte del Gobierno en el que, por causa de fuerza mayor, se otorgará la potestad a la Real Federación Española de Fútbol para cambiar unilateralmente el reglamento de competición. Así lo han apuntado varios medios nacionales y así lo esperan también fuentes de la Comisión Delegada de Segunda B.
A día de hoy, y a falta del Real Decreto que cambiará todo el escenario de las categorías no profesionales, estos son los escenarios posibles para la dar por cerrada la temporada 2019-2020:
Retomar la competición
Es la opción que tanto la Federación como los clubes preferirían, pero resulta utópica. Pese a la desescalada, los clubes de la categoría no podrían entrenar hasta la Fase 3, encuadrada como pronto a finales de mayo. Eso conduciría a un período inferior a un mes para rematar las diez jornadas y los play-offs, si se contabiliza el 30 de junio como final de temporada. En caso de una prolongación, las fechas seguirían sin ser suficientes. Por no hablar del riesgo de la aparición de positivos por Covid-19 en equipos que no se podrán aislar, lo que obligaría a parar de nuevo la competición. Es decir, no habría garantías de acabar en tiempo y forma.
Play-off exprés
La opción que propuso la Federación en un primer momento. Consistiría en clasificar a los actuales cuatro primeros clasificados para una fase de ascenso que, probablemente, se disputaría a partido único en campo neutral. De hecho, se ha hablado de concentrar toda la competición y a los 16 equipos en Las Rozas. La Tercera División también se resolvería por una fase exprés entre equipos del mismo grupo. Al no haber descensos, la Segunda B quedaría compuesta por 94 o 98 equipos, algo que rechazan la gran mayoría de clubes.
Ascenso de primeros
En el caso de que no fuese posible volver a jugar en los próximos meses, la RFEF se plantea la posibilidad de que sean los actuales primeros clasificados de los cuatro grupos de Segunda B los que asciendan a Segunda División. Lo mismo sucedería en el caso de los 18 líderes de Tercera División.
Suspender la competición
Es la única opción que la RFEF puede ejecutar actualmente. Esta suspensión podría ser temporal, hasta que la pandemia permitiese reanudar la actual competición, o definitiva. En ese caso, una vez se pudiese jugar, se iniciaría una nueva temporada y los resultados de la actual no valdrían. Los equipos en play-off están en contra y a la RFEF no le interesa. La intención del fútbol profesional de acabar sí o sí la temporada tampoco ayuda a darle recorrido a esta opción, ya que sería preciso establecer ascensos a Segunda.
