Argelia cumplirá con el suministro de gas natural en los términos ya pactados y está preparado para aumentar los volúmenes de exportación en caso de que España demande cantidades adicionales, pese al abandono el próximo domingo del envío a través del Gasoducto Magreb-Europa (GME). El compromiso fue apuntado este miércoles por el ministro argelino de Energía, Mohamad Arkab, y la vicepresidenta tercera española y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera.
En declaraciones a la prensa tras reunirse en Argel, Ribera reveló que el Gobierno argelino tiene preparado un plan para compensar cualquier descenso o contingencia a través del transporte marítimo de gas licuado.
"Hemos tranquilizado a nuestros socios españoles y les hemos dicho que cumpliremos con nuestro suministro de gas natural en las cantidades pactadas en el marco de los contratos celebrados entre Sonatrach y las empresas españolas", afirmó el ministro. "Estamos listos para hablar sobre volúmenes suplementarios con el fin de suministrar todas las cantidades adicionales que necesiten", añadió.
El ministro argelino de Energía y la titular española de Transición Ecológica analizaron este miércoles el futuro del suministro
La incertidumbre sobre el suministro de gas argelino, clave para la industria española y europea, había crecido desde que el pasado mes de agosto Argelia rompiera las relaciones diplomáticas con Marruecos y anunciara su decisión de no utilizar el GME, que nace en Europa y llega a España a través de Marruecos, una vez que expire el contrato el próximo 31 de octubre.
Días atrás, el presidente argelino, Abdelemedjid Tebboune, ya advirtió de que el suministro a España solo se haría a través del gasoducto Medgaz, que une Argelia y España sin pasar por el territorio marroquí, pero no aclaró que pasaría con los contratos del GME.
TRANSPORTE DE GAS LICUADO. Medgaz tiene una capacidad de suministro anual de unos 8.000 millones de pies cúbicos, similar a la de GME, y está previsto que a finales de noviembre aumente a 10.500, una diferencia que había desatado las inquietudes.
Una preocupación que Ribera trató de despejar este miércoles al revelar que existe un plan para compensar cualquier contingencia o elevar las cantidades a través de una flota de buques para el transporte de gas licuado. "Nos han explicado cómo acometer este transporte de gas a través del gasoducto de Medgaz vista que la relación contractual con el gasoducto del Magreb expira el 31 de octubre y cómo complementarla con gas natural licuado con arreglo a un calendario que tenemos que precisar de la mejor manera posible para asegurar que todo funciona del modo también más fluido y mejor posible", señaló.
El suministro de gas argelino es clave para la industria española y europea
A este respecto, la ministra recalcó que se han estudiado "todos los elementos técnicos que permitan maximizar el transporte de este gasoducto y estar en conversaciones con los comercializadores españoles que se encargan precisamente de poder trabajar, de poder pedir al otro lado de la tubería ese gas.
ELECTRICIDAD. Ribera subrayó que, más allá de los hidrocarburos, se discutieron otros proyectos de cooperación bilateral energética en otros sectores, como el de la electricidad y las renovables, ya que ambos países "que tienen desafíos parecidos en el ámbito del cambio climático, de la energía, del agua y que tienen relaciones institucionales, diplomáticas y comerciales en ámbitos muy distintos".
"Este no es el único aspecto importante de la relación de España y Argelia en relación con la energía. Hemos hablado de otros muchos asuntos, en los que la electricidad, las nuevas fórmulas de energía renovable, el almacenamiento o el hidrógeno, o en su caso la construcción de un cable eléctrico que permita que la interconexión entre los dos continentes pueda llegar a materializarse a lo largo de los próximos años".
