Inmaculada Rodríguez: "Unirisco ayuda a las spin-off a superar el valle de la muerte"

Hacer que los frutos de la investigación científica cristalicen en nuevas empresas es la misión de Unirisco. La sociedad de capital riesgo que las universidades gallegas y grandes firmas crearon en 2001 amplía capital para apoyar nuevos proyectos. Su directora general, Inmaculada Rodríguez Cuervo, explica los desafíos que afronta la entidad
Inmaculada Rodríguez, la directora general de Unirisco.EP
photo_camera Inmaculada Rodríguez, la directora general de Unirisco.EP

La lucense Tastelab, Galchimia, Innolac, Oncostellae o Hifas da Terra son algunos de los proyectos empresariales que brotaron en las universidades gallegas y que Unirisco ha ayudado a despegar. Su directora general, Inmaculada Rodríguez, repasa los desafíos de la sociedad de capital riesgo.

Acaba de participar en el foro Galicia Biodays, que reunió en A Coruña a 200 compañías biotecnológicas para generar contactos y negocio. Da la sensación de que es un sector boyante en Galicia...

Sí. De hecho, Galicia es la segunda autonomía en iniciativas biotecnológicas. Se están cosechando los frutos de una estrategia de muchos años y existe un vivero magnífico en las universidades, especialmente en la de Santiago, una de las más potentes en publicaciones en el área biotecnológica.

¿La pandemia ha contribuido a impulsar el interés de los inversores?

Ni los inversores ni la sociedad eran conscientes de la importancia de la biotecnología, que no se limita solo al suministro de medicamentos. Durante la pandemia se ha visto la necesidad de tener autonomía científica y tecnológica para no depender de terceros países y también de inventar productos y servicios que sean exportables.

¿Es un sector en el que cuesta especialmente encontrar financiación al contar con unos plazos de retorno de la inversión más largos que en otro tipo de proyectos?

Efectivamente. Primero, porque tienen un ciclo más largo de retorno y también porque hay un grado de incertidumbre algo superior, lo que es intrínseco a cualquier innovación. Luego, hay que encontrar clientes que quieran adquirir estas innovaciones o utilizarlas. Tener algo absolutamente novedoso presenta unos factores de riesgo tecnológicos y de mercado. También es verdad que los retornos compensan cuando sale bien, y nuestra experiencia dice que la mayoría prospera al llegar al mercado. Montar fábricas de algo que ya existe o que se hace muy barato en terceros países no es lo más rentable. Aunque haya que invertir un poco más y con riesgo al principio, lo más rentable es algo que tenga un gran valor añadido, como la biotecnología.

Hemos acompañado a 38 spin-off desde 2001. Nuestra cartera de proyectos está valorada en más de 7 millones de euros

¿Cuál es el papel de Unirisco?

Desde su creación hace 20 años, Unirisco es el único capital riesgo vinculado a las empresas que se crean en el seno de las universidades gallegas. Las tres universidades y los principales socios, Abanca, Inditex, San José, Santander, R Cable, BPI y Zona Franca de Vigo, han apostado por este proyecto para ayudar a dar ese impulso a las spin-off en esa fase que se denomina ‘el valle de la muerte’. Es ese lugar en el que hay más incertidumbre y donde el capital privado, que se mide solo por rentabilidad, está más lejano de invertir.

En su día, Unirisco fue un proyecto pionero en España. ¿Ha servido de ejemplo en otras comunidades?

De momento, no hay otra sociedad como Unirisco vinculada a una universidad. Es cierto que ahora que la transferencia de tecnología está siendo una realidad y está incentivada incluso por la nueva Ley de Ciencia, por el Gobierno central y el autonómico, la gente empieza a darse cuenta de la importancia de crear estas empresas. Tenemos contacto con otras universidades interesadas en desarrollar y encontrar el marco normativo adecuado para crear y formar parte de una sociedad gestora, un fondo o una sociedad de capital riesgo.

¿Cuántos proyectos han impulsado?

Hemos acompañado a 38 spin-off. De ellas, solo seis han fallado y no fue nunca por la tecnología, sino por las circunstancias del mercado. Hemos aprendido de esto. Lo primero es educar al mercado, enseñar y generar la demanda. Esto es doblemente complicado, porque hablamos de investigadores, de pequeños equipos que no están especializados en gestión empresarial. Por eso, además de poner dinero, Unirisco acompaña en la gestión, en el gobierno y la estrategia.

¿Qué volumen de inversión manejan?

Partíamos de un capital de 3 millones hace 20 años y se llegaron a generar rotando 6 millones más. Nuestra cartera actual de proyectos está valorada en más de 7 millones.

¿Cómo marcha la ampliación de capital? ¿Entrarán nuevas empresas?

En los próximos días se cerrará la operación y la previsión es que entren dos empresas nuevas, como mínimo. Ha sido muy importante el impulso que nos ha dado la Diputación de A Coruña a través de la USC y la UDC. Lo agradecemos de corazón, porque ha demostrado ser una administración muy sensible con la creación de empleo de calidad y tecnológico. Queremos invertir en muchos proyectos que se están fraguando, pues cada vez hay más. También ser mucho más activos y más intensivos en el acompañamiento de las empresas. Eso requiere recursos.

Comentarios