Las inmobiliarias cargan contra la "incertidumbre" en el alquiler

La Fegein avisa del riesgo de que se retraiga la oferta ante los cambios legales y las incógnitas. Al menos mil contratos gallegos se rigen por el decreto tumbado tras estar un mes en vigor

El alquiler de vivienda ha encajado dos cambios normativos en poco más de un mes, para acabar volviendo al pasado a la espera de lo que se pueda hacer en el futuro. Y es que el Congreso tumbó el martes el decreto que el Gobierno aprobó en diciembre con novedades en cuestiones como la duración de los contratos y devolvió así la vigencia a la ley anterior. Así las cosas, ahora el Ejecutivo estudia nuevas opciones de reforma. En este punto, las inmobiliarias gallegas aseguran que "se ha creado un campo de incertidumbre, inseguridad jurídica y desconfianza".

"Ya había un problema y ahora se agranda", lamenta el presidente de la Federación Galega de Empresas Inmobiliarias (Fegein), Benito Iglesias, ante un mercado con demanda creciente, oferta menguada y precios al alza. No en vano, cree que se ha generado "un pequeño caos" que llevará a algunos posibles arrendadores a esperar a que "estén las cosas claras" antes de poner una vivienda en el mercado. Es decir, que "retraerá todavía más al propietario a alquilar ante la inseguridad y por el desconcierto", y —subraya— eso afecta "sobre todo" a quien necesita vivienda.

Son advertencias que tocan a un mercado que, según Iglesias, ya se frenó algo en el último mes, tras la entrada en vigor el 19 de diciembre del texto que esta semana rechazó el Congreso. "Se estaba encajando", dice el presidente de la Fegein, para quien la norma contenía una novedad en la que arrendadores e inquilinos "más o menos estaban de acuerdo" —la ampliación de la prórroga obligatoria del contrato de tres a cinco años— pero "lo demás era penalizar al propietario". En esa fase de adaptación, como también apunta Alquiler Seguro, en las últimas semanas se registraron
menos contratos de lo habitual.

Aun así, con la referencia de las fianzas recibidas en el mismo período de hace un año en el Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS), se puede dar por hecho que en esos poco más de 30 días de vigencia del decreto se firmaron al menos un millar de contratos, que son los únicos para los que siguen vigentes las condiciones previstas en ese texto. Es decir, la pórroga obligatoria de cinco años, la tácita de tres o el límite de dos mensualidades a los avales. "Han quedado en un limbo", dice Iglesias.

A la espera de posibles cambios, en una materia en la que cree que "ninguna Administración ha hecho los deberes", rechaza la opción de intervenir precios y apuesta por incentivos fiscales que animen a sacar vivienda al mercado.

Las rentas se elevan más de un 4% en un año
En un campo con tan pocos datos oficiales que el Gobierno acaba de urgir al Instituto Nacional de Estadística a elaborar una estudio, las cifras del IGVS —basadas en las fianzas que se depositan en él— son casi una excepción. Al cierre de 2018, constatan que el importe medio de la comunidad se elevó un 4,3% ese año, hasta los 402 euros mensuales.

La ciudad más cara, Vigo —con 481,2 euros—, fue también la que registró el mayor repunte de la Galicia urbana, de un 8,4%. Ferrol fue la única en la que se abarataron los alquileres.

 

El mercado del alquiler en 2018. Datos del IGVS

Ciudad Contratos Diferencia anual Fianza media Diferencia anual
A Coruña  5.452 -3,96%  477,18 € +6,70%
Ferrol 757 +4,85% 329,16 €  -0,59%
Lugo 1.507  +1,96% 350,18 € +3,21%
Ourense 1.869 +2,41% 386,42 € +5,66%
Pontevedra 1.013 -7,23% 443,04 €   +7,31%
Santiago 2.418 +2,50%  425,73 €   +4,16%
Vigo 4.408  -5,37% 481,20 €  +8,38%
GALICIA 29.586 +0,34% 402 €   +4,36%

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