El precio de la gasolina ha batido esta semana su tercer máximo histórico de este año. Tras rebasar la barrera de los 1,3 euros por litro hace siete días y por primera vez en la historia, ahora se encarece otro 1% y escala hasta los 1,321 euros por litro. Con este precio, llenar un depósito de gasolina de un coche (50 litros de media) cuesta 66 euros de media, 10 euros más que hace un año.
Según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea, las revueltas que viven los países del norte de África y el consiguiente encarecimiento del crudo también se deja notar en el gasóleo, que sube esta semana un 1,74%. Su precio asciende así a los 1,289 euros por litro. El gasóleo de calefacción tiene un precio de 86 céntimos de euro por litro y el fueloil de uso predominantemente agrícola se coloca en 47 céntimos.
Con el actual nivel de precios, los profesionales del volante ven cómo aumentan sus gastos mientras los ingresos se mantienen, en el mejor de los casos. La patronal de los transportistas, Fenadismer, ha llegado a amenazar con una huelga si el Gobierno no toma medidas. Ni en el verano de 2008, cuando el petróleo alcanzó niveles récord, el precio medio del litro de gasolina había superado los 1,3 euros, aunque sí el gasóleo, que marcó su máximo en 1,329 euros.
Desde que empezó 2011, los precios medios del litro de gasolina y gasóleo se han incrementado un 5% y un 8,59%, respectivamente. Y frente a las mismas fechas de 2010, las subidas son del 18,05% en la gasolina y del 27,62%, en el gasóleo. Sólo en un mes, la gasolina se ha encarecido un 5%, y el gasóleo un 7%.
El petróleo se dispara
Los conflictos en el norte de África, especialmente en Libia, han disparado el precio del Brent, el crudo de referencia en Europa, en las últimas semanas hasta rozar la barrera de los120 dólares. El barril de Brent para entrega en abril ha abierto al alza en el ICE de Londres y cotizaba a 115,31 dólares, algo que influye, aunque la evolución de los precios de los combustibles depende más de la cotización en los mercados al por mayor del Mediterráneo y el noreste de Europa, así como de los impuestos.
Ante estas subidas, el Gobierno aprobó la semana pasada una serie de medidas, entre las que está la reducción de la velocidad máxima en autovías y autopistas a 110 kilómetros por hora y rebajas en los billetes de Renfe, para reducir en un 5%, unos 2.300 millones de euros, la factura energética del Estado.
