Marine Le Pen, candidata de la extrema derecha a las presidenciales francesas, ha emulado a Donald Trump al anunciar este martes su intención de repatriar la producción de vehículos de casas francesas como Renault o PSA Citröen.
Las dos empresas tienen una gran actividad en varios países europeos, entre ellos España, en donde PSA, por ejemplo, cuenta con una planta en Vigo que genera miles de empleos.
La líder del Frente Nacional fue muy clara en una entrevista en France 2: "Trump está poniendo en marcha medidas que yo llevo años pidiendo". Le Pen se refiere al anuncio del presidente electo estadounidense de aumentar los aranceles a los coches fabricados en el extranjero, una amenaza que ya provocó que Ford cancelase una inversión de 1.600 millones de dólares prevista para una nueva fábrica en México.
La política ultraderechista describió su plan como "patriotismo económico o inteligente proteccionismo".
