Los minoritarios de la vieja Pescanova piden a la CNMV que admita cuanto antes su regreso al parqué

Confían en que, si la empresa vuelve a cotizar, verán "descongelados los ahorros" que destinaron en su día a la compra de títulos
Factoría de Pescanova en Chapela (AEP)
photo_camera Factoría de Pescanova en Chapela (AEP)

Los accionistas de Pescanova S.A. han reclamado este miércoles a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que permita que la sociedad vuelva a cotizar en Bolsa en el plazo de tiempo más breve posible. "Como representantes y voz de más de 9.000 accionistas (...) solicitamos formalmente que tenga en cuenta el esfuerzo realizado por todas las partes", reza una carta firmada por la asociación de minoritarios afectados por Pescanova y dirigida a la presidenta del organismo supervisor, Elvira Rodríguez, en la que piden que autorice su regreso al parqué "en los próximos días".

El documento apunta que Pescanova S.A. —una sociedad de cartera sin más actividad que la financiera— entregó recientemente toda la documentación exigida por la CNMV para permitirle volver a cotizar, y se encuentra a la espera de recibir su visto bueno. Entre los papeles enviados se encuentra un anexo con las cuentas de 2015 de la empresa y también de la sociedad que heredó su actividad pesquera, Nueva Pescanova, de la que posee un 20% de los títulos, así como un plan de negocio de cara al futuro.

Los pequeños accionistas de la matriz han recordado el "sufrimiento" que acumulan desde 2013, cuando la firma solicitó entrar en concurso de acreedores debido a la delicada situación financiera de la entidad, con un agujero estimado por la consultora Deloitte en torno a los 1.667 millones de euros. "Ahora ya sí que no hay motivos para que no se levante la suspensión —de la 'antigua' Pescanova decretada en 2013— este mismo mes", se argumenta en la misiva.

De ese modo confían en ver "descongelados los ahorros" que destinaron a la compra de títulos. Al respecto, recuerdan que las que inicialmente parecían unas simples "diferencias contables", acabaron convirtiéndose en una "pesadilla".

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