Los tractores caminarán hacia Lugo y Santiago

La Semana Blanca por la superviviencia del lácteo sigue adelante. La Subdelegación del Gobierno ha dado su visto bueno a las movilizaciones convocadas por las asociaciones agrarias Sindicato Labrego Galego (SLG), Unións Agrarias (UU.AA.) y Xóvenes Agricultores (XX.AA.), además de al Asociación Galega de Cooperativas Agrarias (Agaca), según ha afirmado este miércoles el secretario general de Unións Agrarias, Roberto García.

Como novedad, esta semana de movilizaciones, entre el 13 y el 17 de julio, contará también con jornadas en las que se convocarán manifestaciones donde los protagonistas serán los ganaderos, y los tractores quedarán aparcados.

Programa de movilizaciones
Según ha declarado García, lo que se estaba cuestionando desde la Subdelegación del Gobierno eran los itinerarios de las manifestaciones, pero estos han conseguido consensuarse. Las ciudades donde las marchas serán visibles son las de Santiago de Compostela y Lugo, hacia las que se dirigirán los ganaderos el día 13 para movilizarse durante una semana por el sector lácteo.

Según explica García, será el día 14 cuando la tractorada recorra Lugo, con protestas concretas en las superficies comerciales de la ciudad de la muralla. El miércoles la tractorada llegará a la capital de Galicia. Por el momento, se baraja el jueves como día para la manifestación de trabajadores sin vehículos agrícolas, para hacer visible su desesperación por la crisis que sufre el sector. Y finalmente el viernes los ganaderos abandonarán las calles.

Acuerdo sindical
Lupe Prado, responsable del sector lácteo del SLG ha confirmado que de momento no tienen problemas con los permisos por parte de la Subdelegación. El itinerario y el calendario de movilizaciones, afirma Prado, aún se encuentra en elaboración.

Los sindicatos aseguran que en lo que va de año las granjas lácteas han dejado de ganar hasta 127 millones respecto al mes anterior. Los ganaderos solicitan ayudas directas, como otros sectores, ya que según calculan cada día dejan de ganar hasta un millón de euros "con las diferencias de precios respecto a años anteriores, sumado a los costes de producción", según explica el secretario xeral de XX.AA, Francisco Bello.

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