Pablo Junceda: "Queremos ser un banco gallego de referencia"

Desde que el Sabadell absorbió el Banco Gallego en abril de 2013 por un euro, SabadellGallego ha logrado abrirse camino en el mercado financiero autonómico. Hoy tiene como clientes al 78% de las grandes empresas y al 35% de las pymes y se afana por arañar cuota entre los particulares

Junceda, en la Praza do Obradoiro. PEPE FERRÍN (AGN)
photo_camera Junceda, en la Praza do Obradoiro. PEPE FERRÍN (AGN)

Con raíces que se extienden de Viveiro a Tui, Pablo Junceda (Oviedo, 1966) se puso al frente de la expansión del Sabadell en Galicia después de que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria adjudicase a la entidad catalana el Banco Gallego en una subasta tras inyectarle un rescate público de 325 millones. SabadellGallego se fija ahora nuevas metas después de doblar su volumen de negocio hasta rozar los 7.000 millones.

Están a punto de cumplirse seis años de la absorción del Banco Gallego. ¿Han logrado cumplir sus objetivos?
Cuando empezamos este proyecto tan bonito yo dije a las gallegas y gallegos con los que trabajo que transcurridos los primeros cinco años deberíamos ser capaces de demostrar que el nuestro es un proyecto de futuro y que queremos ser un banco querido y respetado en Galicia. Lo hemos conseguido con creces y demostrándolo con números. Hemos duplicado la financiación a empresas y familias. Hoy el 78% de las grandes compañías gallegas y el 35% de las pymes trabajan con SabadellGallego y puedo decir que todo el equipo está orientado a alcanzar una cuota del 10% en particulares. Además, en el primer trimestre de 2019, si preguntas a los gallegos que te digan el nombre de un banco de Galicia, entre los cinco más conocidos siempre aparece SabadellGallego. Cuando entré en el sector hace 25 años mi primer maestro me decía que en nuestro negocio lo que no son cuentas son cuentos.

¿Qué retos se fijan en el medio plazo?
El primero es alcanzar una cuota mínima del 10% en la comunidad. Otro muy importante es cualitativo: ser reconocidos como un banco gallego de referencia. Y luego, la tercera meta no es fácil de conseguir, pero, en estos momentos, SabadellGallego está en la primera posición de calidad de la banca gallega y pretendemos mantenernos. Tenemos una nota del 8,86 de valoración externa de los clientes. También nos interesa reforzar nuestra posición en el medio rural, esto es, en la Galicia interior y la vinculada al sector pesquero. Entre las grandes empresas, queremos llegar a una cuota del 80 o el 85%.

Estamos cómodos con nuestra estructura con 125 oficinas; el futuro de la banca será digital, pero también de personas

En Galicia aún sigue costando ganar cuota en el negocio de particulares. El arraigo del negocio de las antiguas caixas todavía es fuerte... 
Siempre digo a mi equipo que hay que preocuparse de ser un banco querido, respetado y conveniente para los gallegos. La competencia nos encanta y si viene de entidades con mucha presencia en Galicia, más, porque nos hace trabajar para hacer las cosas mejor. SabadellGallego tiene un doble componente que no tienen otras entidades locales. Tenemos alma local y estamos muy orgullosos del apellido gallego, pero también tenemos una estructura y vocación global por nuestra presencia potentísima en España, Portugal, Reino Unido, Estados Unidos, México, China o en el norte de África. Ponemos el foco en demostrar a los clientes que el futuro de Galicia no está solo en lo local, sino que también hay que apoyarse fuera. En estos momentos, el mejor pasaporte que puedes llevar es el de SabadellGallego.

¿El banco apoya muchos proyectos de firmas gallegas en el extranjero?
Una de las áreas de negocio que mejor está funcionando y que más impulso está teniendo es la de internacionalización. Tenemos en Galicia un equipo muy potente de expertos que prácticamente cubren todo el territorio, desde Ribadeo hasta Tui, con centros especializados de negocio internacional en Vigo y A Coruña. Siempre digo que el futuro de la economía gallega depende de cuatro ‘E’. La primera es la de los ‘empresarios’. La segunda es la ‘E’ de la ‘educación’, pues el futuro de la economía dependerá de la formación que demos a nuestros jóvenes. La tercera es la de las ‘exportaciones’, dado que Galicia no va a ser ni podrá mantener un liderazgo si no fomenta mucho el comercio exterior. La cuarta ‘E’ es el trabajo en ‘equipo’ de patronales, cámaras de comercio, asociaciones y empresas familiares con los gobiernos para hacer una estructura económica muy sólida. En este capítulo, SabadellGallego puede aportar una visión potente, que es el apego a lo local y al mundo empresarial con nuestra vocación internacional.

¿Las decisiones relevantes a nivel de concesión de crédito se siguen tomando desde Galicia? ¿En qué medida interviene Barcelona?
La galleguidad se demuestra decidiendo en Galicia. Si tienes que explicar lo que es una batea a 2.000 kilómetros de distancia lo tienes muy complicado. Entonces, el grupo nos ha dado la confianza de poder decidir el 98,99% de las operaciones de inversión aquí. Las decisiones que no se toman en Galicia son una mínima parte, porque tenemos la confianza de un gran grupo que sabe que aquí las cosas se están haciendo muy bien desde hace años. Es una muestra más de la galleguidad de SabadellGallego.

Estamos orgullosos  del apellido gallego; tenemos alma local y una estructura y vocación global al operar en varios países

Otras entidades están optando por aplicar expedientes de regulación de empleo. ¿Ustedes están cómodos con su red en Galicia?
Tenemos 125 oficinas entre las de banca comercial, de empresas y banca privada y si tuviese que construir un banco de cero en Galicia y me preguntasen cuántas sucursales querría tener, diría que las mismas, pues tenemos la estructura ideal para cubrir todas las comarcas. Bien es cierto que el mundo digital avanza mucho y que se va a producir una transformación grande. Pero pensamos que el futuro de la banca va a ser digital, pero también será de personas, que seguirán trabajando en las oficinas y yendo a ellas como clientes. Estamos comodísimos con nuestra estructura actual y tenemos claro que el gran valor que tiene un banco como el nuestro son sus empleados y directivos. Por eso, apostamos firmemente por ellos.

¿Seguiréis apostando también por la marca diferenciada?
Estamos muy orgullosos del apellido gallego, que refleja el profundo respeto que tiene el grupo Sabadell y la ilusión con la comunidad. La galleguidad del grupo ya forma parte de su ADN. Además, nuestro presidente [Josep Oliu] dice muchas veces que las marcas son patrimonio de nuestros clientes, de modo que mientras a ellos les guste y lo quieran, seguiremos.

¿Qué novedades nos depara el proceso de digitalización?
Somos una de las entidades más volcadas y que más está invirtiendo en estos procesos. No vemos la digitalización como una forma de ahorrar costes, sino de acercarse a nosotros de forma mucho más cómoda. Tal y como la concebimos, la digitalización no es que los clientes hablen con un robot, es que puedan hablar con las personas del banco desde el sofá de su casa un sábado por la tarde o un domingo por la mañana. Una vez en contacto con el banco, la relación debe ser de persona a persona, no de persona a máquina. Hoy nuestros gestores ya no esperan que las empresas vengan a la oficina, se desplazan porque llevan el banco en una tablet. Es una apuesta por una tecnología humana.

El 16 de junio entra en vigor la nueva ley hipotecaria que clarifica aspectos como el reparto de gastos. ¿Sabadell ya ha realizado la adaptación?
Siempre hemos cumplido, cumplimos y cumpliremos de forma estricta y rigurosa lo que marca la ley. En cuanto entren en vigor las modificaciones, ese día el grupo Sabadell tendrá operativo su modelo para cumplir la norma. En estos momentos, la apuesta del banco por el crecimiento hipotecario es muy fuerte. Hoy nuestra oferta es la mejor que hay en Galicia. Ante una decisión tan importante como es la adquisición de una casa, un banco que tiene vocación de acompañar a una familia debe estar a la altura. 

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