La patronal del metal de la provincia de Pontevedra —Asime, Atra e Instalectra— y los sindicatos UGT y CC OO han llegado este martes a un preacuerdo sobre el convenio colectivo del sector, cuya vigencia será de tres años —desde 2020 hasta 2022—. Esto supone la desconvocatoria de huelga prevista por la parte social para este jueves.
El preacuerdo cuenta con el respaldo mayoritario de la parte sindical, si bien la CIG se ha desmarcado del mismo, al considerar que es "muy negativo" porque supone seguir "perdiendo derechos". Así, entiende que representa "una traición a los trabajadores del sector metal".
Este documento, que será firmado y registrado en próximos días, contempla incrementos salariales del 0,5% en 2020, sin generar atrasos —únicamente a los efectos de actualizar las tablas—; del 1,75% para 2021 sobre la tabla salarial de 2020; y del 1,75% para 2022 sobre la tabla salarial del año previo.
El preacuerdo alcanzado supone por parte de la patronal renunciar a la propuesta de permitir la entrada de ETTs en las empresas; no obstante, sí se ha acordado su planteamiento de que la indemnización de contratos eventuales se pague al finalizar el contrato y no mes a mes, como hasta ahora.
El convenio contempla también que todas las partes se comprometen a crear una comisión de igualdad con el objetivo de redactar un protocolo de acoso laboral, sexual y de género.
POSICIÓN DE LA PATRONAL. La patronal ha destacado que este acuerdo "es fundamental para aportar estabilidad y paz social al intenso trabajo" que las empresas del metal tienen que llevar a cabo "para recuperar la facturación y el empleo perdido en los últimos meses". Así, ha trasladado su confianza en que "tanto las empresas como los trabajadores y la sociedad en su conjunto valoren positivamente este acuerdo, que viene a contribuir al trabajo conjunto de todos a favor de la creación de empleo y de riqueza para Pontevedra y Galicia".
"Este convenio colectivo es el convenio sectorial con más empresas y trabajadores afectados en Galicia y uno de los cinco más relevantes en toda España; por lo tanto, este preacuerdo puede llegar a impulsar otras negociaciones que actualmente están paralizadas", ha rematado.
SINDICATOS FIRMANTES. Por su parte, CC OO ha indicado que, tras analizar la propuesta de la patronal, se llegó al preacuerdo "con la idea de garantizar la estabilidad del sector". "Pese a los intentos de la parte empresarial por precarizarnos y empeorar nuestras condiciones, salimos del acuerdo sin ceder ni uno solo de los derechos adquiridos a base de lucha y organización", ha asegurado.
Rubén Pérez, de UGT, ha indicado a Europa Press que este preacuerdo ha sido posible porque los sindicatos firmantes han hecho "un ejercicio de responsabilidad en la situación complicada" que se está viviendo. "Consideramos que los salarios de los trabajadores no podían ser los que estuviesen soportando la situación, congelados desde 2019", ha apuntado.
En este sentido, ha puesto en valor el "incremento salarial del 4% hasta 2022", así como "no haber perdido derechos que los trabajadores tenían ganados". De esta forma, respecto al acuerdo sobre el pago de las indemnizaciones de los eventuales, ha considerado que "ningún trabajador va a perder sus derechos".
Así, ha remarcado que este cambio permitirá "actualizar la indemnización, que hasta ahora era una cuantía fija y no reflejaba la realidad de cada trabajador —ya que no estaba contemplado, por ejemplo, si tenían nocturnidad—". Además, la patronal se ha comprometido a que, "ante cualquier incumplimiento" por parte de empresas, denunciarán "conjuntamente".
POSTURA DE LA CIG. El portavoz de la CIG, Xulio Fernández, ha trasladado, en declaraciones a Europa Press, que este convenio es "una traición a los trabajadores" del sector metal, ya que, ha asegurado, "es peor acuerdo que el primero, en el que la patronal ya daba incrementos del 0,5% en 2020 y del 2% en 2021" —inicialmente no se incluía en la negociación el año 2022—.
Además, ha criticado que se haya accedido a uno de los "principales caballos de batalla", como era el plus de la eventualidad. En relación a ello, ha avisado que el pago de la indemnización a la finalización del contrato temporal "va a ser un chantaje" por parte de las empresas para no pagar cláusula. "La empresa dirá: 'Si quieres renovación, esto no te lo pagamos'", ha avanzado.
En este sentido, ha criticado que los sindicatos CC OO y UGT, con los que había convocado la huelga de este jueves y con los que llevó a cabo otras movilizaciones en las últimas semanas, hayan accedido a este acuerdo. Según ha indicado, con este preacuerdo, que cree que estaba "consensuado desde antes de la reunión", la huelga queda desconvocada, si bien la CIG llevará a cabo asambleas con sus delegados para explicar el acuerdo, trasladar su valoración y determinar posibles medidas a realizar.
